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Las razones por las que se pierde estatura con los años y cómo cuidarnos en este sentido

A partir de los cuarenta perdemos un centímetro cada diez años aproximadamente

Si tienes abuelos o padres mayores habrás notado que de un tiempo a esta parte parecen haber menguado de estatura, pues bien, no es una impresión tuya, después de los cuarenta años solemos perder cada diez años un centímetro de estatura aproximadamente y a partir de los setenta años, incluso algo más.

Esto no pasa repentinamente ni a todo el mundo por igual, sino que es después de muchos años cuándo se nota esa pérdida de centímetros, que puede llegar a ser de siete en total y en la que pueden intervenir tres factores fundamentalmente: la osteoporosis, la deshidratación y degeneración de los discos intervertebrales y la pérdida de tono muscular o sarcopenia, explican desde la web de Cuidadores.

A todo ello hay que sumarle un cuarto factor que puede influir en ello: el sedentarismo, que cada vez está más presente en nuestra sociedad, sobre todo en lo que se refiere hábitos laborales y que no sólo afecta a los huesos sino que puede provocar problemas cardiovasculares o diabetes, entre otros. De ahí que los expertos recomienden la práctica de deporte, para prevenir sobre todo.

El ejercicio puede prevenir que desarrollemos los factores clave en la pérdida de estatura

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Deportes que, al llegar a una determinada edad, se recomienda que sean de tipo aeróbico (ciclismo, natación o baile entre otros), pero combinados con ejercicios de fuerza, además de con una dieta sana, para lograr más tono muscular y mayor densidad ósea. Y es que tener estos hábitos: «nos puede llevar a evitar o atenuar problemas más importantes como sarcopenia, osteoporosis, diabetes, etc. factores que agravan el hecho de perder estatura con la edad«, explican.

Además, el peso también cambia con la edad, los hombres suelen aumentar de peso hasta más o menos los 55 años, y luego comienzan a bajar. En el caso de las mujeres aumentan de peso hasta los 65 años y luego empiezan a bajar, aunque los hábitos alimentarios y de actividad física tienen mucho que ver en ello, explican desde medlineplus.gov.