¿Qué es el Síndrome de Kessler y por qué preocupa tanto a los científicos?

Según algunos expertos, ya hemos entrado en la primera fase

Ana Más

El pasado mes de octubre el Comando Espacial de Estados Unidos informaba de la ruptura, por causas aún desconocidas, del satélite Intelsat 33e, que se desintegró dejando tras de sí unos veinte fragmentos. Algo que para algunos miembros de la comunidad científica ha supuesto pensar en la posibilidad de que el síndrome de Kessler sea una realidad.

Y es que con este nombre se conoce a la teoría que predice un efecto cascada de colisiones catastróficas en el espacio. Donald Kessler y Burton Cour-Palais, ambos científicos de la NASA, hablaron del Síndrome de Kessler por primera vez en 1978, describiendo un escenario en el que la acumulación de desechos en la órbita baja terrestre generara colisiones que a su vez producen más fragmentos, desencadenando un ciclo imparable de destrucción.

Algo que, de producirse, podría inutilizar el espacio cercano a la Tierra, poniendo muy difícil o imposibilitando el lanzamiento de satélites, con lo que esto supone para la tecnología y la vida cotidiana, además de amenazar la viabilidad de las estaciones espaciales. Y es que según algunos científicos, ya hemos entrado en la primera fase del síndrome de Kessler.

Cómo puede afectarnos el Síndrome de Kessler

La Tierra desde el espacio.

Desde Huffington Post aluden a Darren McKnight, Senior Technical Fellow de la empresa LeoLabs, que analiza desechos espaciales. Este explica que «esta primera etapa está marcada por la aparición de disfunciones y anomalías en los sistemas de satélites, estaciones espaciales y cohetes que vendrían generadas por pequeñas colisiones de fragmentos de basura espacial».

Y es que los satélites son fundamentales para el buen funcionamiento del GPS, la banda ancha, las telecomunicaciones y la televisión, entre otros servicios. Y si estos (los satélites) fueran dañados y no fuera posible reemplazarlos podrían producirse apagones en Internet y colapsarse las redes telefónicas, con lo que esto supondría.

De ahí la insistencia de los expertos en la necesidad de la cooperación internacional y normativas vinculantes para gestionar el problema de los desechos espaciales. El Dr. Vishnu Reddy, de la Universidad de Arizona, señala la falta de regulación como la mayor preocupación, ya que «contar con normas y directrices ayudará mucho«.