A Mar Flores ‘se le cae la baba’ con Marco, su primer nieto: «Me muero cada vez que le veo»

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A principios de diciembre, Mar Flores se convirtió en abuela por primera vez a los 55 años, después de que su hijo Carlo y la pareja de este, Alejandra Rubio, fueran padres de Carlo Jr, su primer hijo en común. La modelo en alguna ocasión ha reconocido que la palabra ‘abuela‘ le gusta y reconoció ante la prensa que aunque la noticia había sido un poco shock al principio, estaba encantada con la llegada del bebé y con la felicidad de la pareja.

Además, Mar Flores reconocía entonces, meses antes de que naciera el pequeño, que es ‘muy niñera’ y que le gustaría pasar tiempo con él: «Dependerá de cuánto tiempo me le dejen. A lo mejor no me lo quieren dejar de lo que lo maleduco«, explicaba entre risas.

Ahora, cinco meses después de convertirse en abuela, la prensa le volvía a preguntar por su nieto en los premios Gentleman’s Day by Luxury Spain, en los que ejercía de maestra de ceremonias: «Está fantástico, he ido a verle ayer, antes de venir, y la verdad que es queme muero cada vez que le veo, pero no te digo nada que no te digan otras abuelas«. Y hablaba así del cambio que le ha supuesto su llegada: «La vida cambia, pero para bien, eso es lo bonito«.

Además de con su nieto, Mar Flores está feliz con la libertad de su hijo Carlo

A la felicidad de Mar por ser abuela, se suma ahora la de ver que su hijo Carlo ya duerme en casa, tras cumplir una condena de 21 meses por un delito de estafa agravada en un negocio de compraventa de coches de lujo. Una de las primeras cosas que el joven ha hecho tras cumplir su condena ha sido viajar a Italia para que su abuela, la madre de Carlo Costanzia padre, conociera a su bisnieto.

Y es que las abuelas del bebé no pueden ser más mediáticas. Por parte de padre Mar Flores y por parte de madre Terelu Campos. Respecto al tiempo que pasan con cada una de ellas, su hijo Carlo explicaba hace unos meses: «Hemos estado con todos los abuelos, hemos estado muy bien y hemos estado visitando a todos». Y en concreto sobre el papel de su madre como abuela dijo que lo llevaba ‘divinamente’ y que estaba muy bien y muy contenta.