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La sonada escena de Cristina Tárrega en ‘Bake Off: famosos al horno’: «Ya está bien»

Es una de las catorce concursantes de esta edición

Ana Más

Catorce famosos se convertirán en pasteleros en la nueva edición de ‘Bake Off: famosos al horno‘ que se estrena este domingo doce de enero a las diez de la noche en  La 1 de TVE: Isabel Gemio, Cósima Ramírez, Maestro Joao, Cristina Tárrega, Pol Espargaró, Finito de Córdoba, Yurena, Mark Vanderloo, Víctor Sandoval, Carmen Morales, Nagore Robles, Mario Marzo, Lidia Torrent y Mario Jefferson, han sido los seleccionados para esta edición.

Cada uno de ellos tendrá que hacerse con el delantal de ‘pastelero estrella’, lo que significa que es el mejor pastelero y por el contrario el concursante menos bueno será eliminado. Además en cada episodio habrá invitados del mundo de la gastronomía, la música, el deporte y la interpretación.

Paula Vázquez, que presenta el programa se mostraba orgullosa de formar parte del elenco y admitía que: «Este programa tiene una vida especial«. Eva Arguiñano, Paco Roncero y Damián Betular completan el equipo de jueces. La primera hablaba de la emoción que siente al descubrir la personalidad de los concursantes y Roncero reconocía que en esta edición han ahondado más y eso ha supuesto lágrimas y diversión a partes iguales.

Cristina Tárrega:»no me filméis, por favor»

La organización del programa ha difundido un vídeo presentación del concurso en el que vemos a todos los concursantes en un autobús que conduce Paula Vázquez y en el que vemos algunos de los mejores momentos del concurso. Entre todos ellos han llamado la atención los protagonizados por Cristina Tárrega, a la que vemos la vemos reconociendo que algunos días ‘lo borda como cocinera y otros lo pespuntea’ y en otros la vemos abandonando el plató entre lágrimas, tras haberse cortado o quemado, con un: «No me filméis, por favor. Ya está bien».

Y no han sido las únicas lágrimas que muestra el vídeo, en el que vemos momentos de lo más emotivos de varios de los concursantes, aunque tampoco faltan las risas, la complicidad y la alegría. Sin duda el concurso promete.