Lista de la compra inversa: el método con el que ahorrarás en el supermercado

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Tener una alimentación saludable y una economía saneada pasa por ir al supermercado con una lista de la compra que nos ayude a organizar nuestros menús y a no arruinarnos. Y es que seguramente si vas sin lista a hacer la compra, acabarás comprando cosas que no necesitas y olvidándote de aquello que sí te hace falta.

Para ello, lo primero es saber qué tenemos en la cocina y qué nos falta, sin olvidarnos de los alimentos congelados. Lo siguiente es adaptar tu lista a tu menú semanal. Es decir, hazla cuándo sepas lo que vas a comer esa semana y no al revés. Y por último repón los productos cuándo todavía te queden, para no quedarte sin nada.

Pero hoy hablamos de un tipo de lista de la compra diferente a la convencional, la lista de la compra inversa, que, como su propio nombre indica, se hace escribiendo en un papel o en una de las aplicaciones de móvil para ello, como Anylist, Bring o Listonic, lo que ya tenemos en nuestra nevera, despensa y congelador. Con esto conseguiremos saber qué no tenemos que comprar.

Cómo elaborar tu lista de la compra inversa

Una especie de inventario en el que tendrás todo lo que hay en la nevera y la despensa, «para saber qué hace falta comprar, marcas los alimentos que se han acabado o están a punto de acabarse», explican desde eldiario.es.

Además, una vez que elaboremos la primera la tendremos disponible para compras futuras. De esta forma no solo no comprarás lo que no necesites, sino que intentarás cocinar con lo que ya tienes en casa y aprovechar así mucho más y mejor la comida.

Lo primero es revisar tu despensa, frigorífico, congelador, armarios y añadir los alimentos que tienes en ellos a tu lista, ordenados por categorías y anotando al lado la cantidad que tienes de cada uno, explican desde el mismo medio. Según vayas utilizando los artículos actualiza el inventario. Y proponen este ejemplo de organización:

• Especias e ingredientes de repostería 
• Productos secos de despensa (arroz, legumbres, pasta)
• Latas
• Congelados
• Lácteos 
• Verduras y frutas
• Carne y pescado fresco

Te será especialmente útil si tienes un plan de comidas semanal o sueles hacer las mismas recetas. Tan solo tendrás que añadir alimentos cuando haya una excepción como una cena con amigos o un cumpleaños.