Ten cuidado con tu pasta de dientes: Podrías sufrir estos efectos adversos

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Para cuidar la salud bucal, el principal paso es cepillarse los dientes a diario y tres veces cada día, como mínimo. Además de ello, resulta clave escoger bien un cepillo y cambiarlo con regularidad, además de comprar una buena pasta de dientes que mejor nos convenga y no limitarse a comprar la más barata o la más anunciada en televisión.

En este sentido, el presidente del Consejo General de Dentistas de España, Óscar Castro Reino, ha concedido una entrevista al diario ‘La Voz de Galicia’ en la que destaca algunos de los consejos que deberías seguir para escoger el dentífrico que se ajuste más a nuestras necesidades.

El profesional de la salud advirte sobre todo de dos tipos de pastas de dientes que solemos comprar con la convicción de que serán las mejores, pero realmente podrían causar efectos adversos en la dentadura o incluso el efecto contrario al que se refiere la recomendación del producto.

¿Qué pasta de dientes usar y en qué cantidades?

En primer lugar, se refiere a las «supuestamente blanqueadoras». Castro dice que realmente no lo son, y que, incluso, muchas de ellas lo único que pueden llegar a causar son manchas amarillas en los dientes, consiguiendo así agravar el mal que padecen las personas que se compran este producto en busca de una solución a ese mismo problema.

Por otro lado, el experto se refiere también a las antisépticas. Estas contienen clorhexidina, el que se supone que es uno de los mejores antísepticos. Pues resulta que para esta acción diaria no lo es. Al  igual que el ejemplo anterior, estos dentífricos también causan ese efecto de tinte, como también lo harían los enjuagues bucales que presenten esa misma sustancia.

Después de todo esto, nos llega la duda de saber si estamos eligiendo bien nuestros productos de salud bucal. En este sentido, para un uso normal, se recomienda que el producto contenga fúor, como mínimo mil partes por millón, y que entre sus características se encuentre la  de baja abrasividad.

Además, y a modo de conclusión, recalca que la cantidad recomendada de pasta que debes echar en el cepillo no debería superar el tamaño de un garbanzo, mientras que para un niño, lo compara con el tamaño de un guisante.