Tamara Falcó desvela en ‘El Hormiguero’ cómo son las discusiones con Íñigo Onieva: «Siempre tengo razón»

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Los jueves, El Hormiguero se convierte en un espacio de confesiones para los tertulianos que se sientan a la mesa, especialmente para Nuria Roca, Juan del Val y Tamara Falcó. En este sentido, suele ser la marquesa de Griñón quien no vacila en desmentir información errónea o en proporcionar detalles adicionales sobre algo que el público desconoce.

Un ejemplo de esto ocurrió cuando Falcó reveló la naturaleza de sus broncas con Íñigo Onieva, describiendo estas discusiones como algo que no es tan serio y que puede prolongarse un poco. La situación se originó durante la visita de Chanel Terrero (la representante española en Eurovisión 2022) el pasado martes. Durante la llamada telefónica del conocido concurso de la tarjeta de El Hormiguero con su característica pregunta de «¿sabe usted lo que quiero?«, los espectadores fueron testigos de una discusión de pareja.

Después de que el espectador acertara, Pablo Motos quiso conocer qué estaba haciendo justo antes de la llamada del programa. El hombre respondió que estaba en medio de una discusión con su esposa. Esta revelación dio pie al debate que se produjo este jueves durante la tertulia.

Tamara Falcó sobre sus discusiones de pareja

Uno de los testimonios más anticipados era, indudablemente, el de Tamara Falcó. Después de todo, ¿quién no se pregunta cómo serán esas discusiones con Íñigo Onieva? En este sentido, la socialité no vaciló en responder sinceramente y explicar qué sucede cuando ella y Onieva tienen sus desacuerdos. «Cuando estoy enfadada odio que me pregunten si estoy enfadada«, comenzaba diciendo la hija de Isabel Presyler. «Es que nuestros cambios hormonales como mujeres son difíciles de controlar», explicaba.

Y añadía algo totalmente desconocido sobre su marido: «Íñigo tiene la mecha mucho más corta que yo, pero yo tardo mucho más en desenfadarme». De hecho, «yo puedo estar hasta que se levanta, me abraza y me pregunta: ‘¿Podemos pasar ya de esto?’. Tardo. Yo puedo pasarme un montón de tiempo».

La marquesa también mencionaba el motivo por el que sus discusiones se alargan en el tiempo. «En mi cabeza yo soy jueza y decido qué está bien y qué está mal. Dicto sentencia«. Y, para zanjar el tema, Falcó soltó riéndose: «Siempre o bastantes veces, tengo razón. Me atrevería a decir que un 98% de las veces«.