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«Se me deformaba la cara sin razón»: Aurora Carbonell (‘Al salir de clase’) revela la enfermedad que la apartó del trabajo

La actriz confesaba que ahora se sentía preparada para hablar de ello

Hay una generación a la que la actriz Aurora Carbonell marcó para siempre, y es que esta formó parte de una de las ficciones más aclamadas de inicios de siglo: Al salir de clase. La actriz saboreó el éxito de aquellos años, como también lo hicieron sus compañeros de reparto. No obstante, hace unos años veía paralizada su carrera en el mundo de la interpretación a causa de una enfermedad. 

Ha sido a través de sus redes sociales donde Carbonell se ha querido sincerar con sus seguidores, asegurando que tras varios años de silencio ya se siente preparada para hablar de ello.

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«Llevo más de 8 años tratando de saber qué me está pasando. Muchos de ellos intentaba sobrevivir a los días porque mi cuerpo no funcionaba bien y sentía que me estaba consumiendo«, expresaba junto a varias imágenes en las que mostraba el aspecto de su vientre, hinchado en 2017 mientras que dos años más tarde se hace visible una notable pérdida de peso.  Ver más

Sobre los síntomas que le hacían ver que algo no estaba bien, cuenta: «Se me deformaba la cara sin razón aparente, además de tenerla inflamada, la piel estaba escamada, insoportables dolores articulares, falta de hierro…»

La actriz aseguraba emocionada en el vídeo que compartía en sus redes que han sido años muy duros, pero que actualmente está bien. Además, aprovechaba para recordar lo importante que es tener presente que tan solo tenemos una vida y que cada día merece ser vivido al máximo.

Los problemas que apartaron a Aurora Carbonell de la ficción

Esta respondía con ello a una de las mayores incógnitas de sus seguidores, y es que llevaba muchos años ausente de proyectos profesionales. «Intoxicación por metales pesados, intolerancias alimentarias, infección de bacterias por el cuerpo, permeabilidad intestinal, disbiosis, todo mi sistema inmunológico estaba alterado. Y hay más, estos años han sido difíciles…«, confesaba.

Y eso no es todo, pues asegura que mientras trataba de dar con el problema en su salud, tuvo que lidiar con un diagnóstico erróneo y los miedos que ello conllevaba. «Durante un año estuve con un diagnóstico equivocado de mi corazón. El día después de diagnosticarme esta lesión, mi gran amigo Borja, que tenía una patología similar y que llevaba años recuperándose, fallecía de madrugada en la cama por un infarto. Entenderéis mi miedo cada vez que me iba a dormir. Nunca tuve esa lesión, menos mal que pedí una segunda opinión«, apuntaba esta.