Y es que Antonio Gala demostró siempre tener una gran capacidad para analizar y explicar cómo es el ser humano, sus miedos y su comportamiento, así como el futuro que le depara como sociedad. Hace 32 años el escritor se atrevía a hacer un vaticinio sobre el futuro tecnológico y cómo eso iba a afectar a las relaciones entre las personas.
«Ese futuro tecnológico nos va a caer muy grande. A nosotros por lo menos. ¿Qué va a ser? ¿En qué va a consistir? En unas personas que probablemente vivirán más de lo que vivimos ahora, a unas personas en plenitud, si es que se puede llamar en plenitud a unas personas prefabricadas, que tendrán que trabajar más que nosotros porque tendrán que alimentar a más viejos, a menos niños y a los que no trabajen, que serán muchos«, se le escucha decir a este en un encuentro con Jesús Quintero para el programa Trece Noches, de Canal Sur.
Ese futuro inmediato que nos llega en tres días, ¿cómo va a ser?
Hace 33 años Antonio Gala viajó al futuro para tratar de rescatarnos con su lucidez de los pantanos de la uniformidad artificial que hoy nos asola.
Vía @antoniogalafans pic.twitter.com/fCDVLT2Ije
— alberto jiménez (@jumber) December 30, 2023
Este vaticinaba un futuro en el que existirían «una especie de conductas manejadas o por órdenes o por folletos, porque no tendrán mucho tiempo para leer«. Esos folletos serían las respuestas o claves para satisfacer algunas necesidades o deseos: «cómo se tiene éxito, cómo se hacen amigos, cómo se tiene una casa, cómo se conquista a una mujer, cómo se divierte uno más…»
Ahora bien, «como todos leerán los mismos folletos las relaciones serán muy fáciles pero muy aburridas». Además, Antonio Gala mencionaba algo que tenemos muy presentes hoy en día, la inteligencia artificial. «La inteligencia natural será sustituida por inteligencias artificiales que ayudarán a la gente no a conseguir la felicidad, pero sí a pasar el tiempo«, expresaba en 1991. Tan certero que asusta.
Son muchos los usuarios que han compartido este vídeo en sus redes. Entre ellos el artista Alejandro Sanz, que entre aplausos escribía lo siguiente:
MÁS SOBRE: