Pepi y Manuel, de Málaga y Albacete, respectivamente eran una de las parejas que acudían esta semana a ‘First Dates‘ dispuestos a encontrar el amor. Pepi, era la primera en llegar al programa, pero no iba sola, le acompañaba su hijo Alejandro, que finalmente iba a tener un importante papel en la cita de su madre. Poco después llegaba Manuel, un mecánico jubilado que iba con la intención de encontrar una mujer «simpática y divertida a la que le guste salir a pasarlo bien».
Sin embargo la cita fue bastante peor de lo esperado. Sobera acompañó a la pareja a la mesa, explican desde Mundo Deportivo, donde conversaron de varios temas, aunque los dos se dieron cuenta enseguida de que sus gustos no tenían nada que ver.
Entonces Pepi, en un momento de la cita, le decía a Manuel que la disculpara que en un ratito volví. La razón era que quería pedirle consejo a su hijo que veía atento la cita en una sala cercana.
En ese momento una de las camareras, Laura Boado, se acercaba al soltero para preguntarle sobre su cita: «Me ha dicho que iba al baño. Pienso que ahora volverá», le explicaba Manuel y en ese momento el hijo de Pepi, que había visto la escena, le advertía a su madre que el hombre pensaba que le había dejado plantado.
Sin embargo nada más lejos de la realidad, Pepi, al momento, volvía junto a Manuel, después de escuchar los consejos de su hijo, al que por cierto no le había gustado Manuel para su madre. Minutos más tarde, Pepi reconocía que no era el tipo de hombre que buscaba y por eso no quería tener una segunda cita con él.
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