Raphael fue el encargado de dar la bienvenida a todos los asistentes, interpretando uno de los grandes clásicos de cada navidad, ‘El tamborilero’, para posteriormente cantar, entre vítores, ‘Que sabe nadie’, uno de los éxitos de su discografía. Recibió, sin duda, una de las grandes ovaciones de la noche, y las más de 15.000 personas que se congregaron en uno de los recintos más conocidos de nuestro país gritaron su nombre al unísono para agradecerle su paso por el escenario.
Posteriormente se vivió uno de los momentos más especiales de la noche, ya que Pablo Alborán hizo su primera actuación en solitario desde que decidiera tomarse un descanso que le ha tenido alejado de los escenarios durante varios meses. Pisó las tablas para interpretar ‘Prometo’ y ‘Saturno’, ambas en versión acústica, ya que no le hizo falta más acompañamiento musical que el de su piano para demostrar el potencial y la magia de su voz.
Malú pisó el escenario del WiZink Center de Madrid, donde cerrará su gira ‘A Todo Sí’ el próximo 18 de diciembre. Su actuación en el recinto fue, como cada vez que entra por sus puertas, apoteósica. Los asistentes pudieron escuchar ‘A prueba de ti’ y ‘Blanco y negro’, dos éxitos más que reconocidos en su carrera.
Vanesa Martín por su parte optó por interpretar una de las canciones favoritas de sus seguidores, ‘Polvo de mariposas’, junto a uno de sus últimos himnos, ‘He sido’, en una actuación que hizo que el WiZink Center se tiñera con una magia especial.
Con Manuel Carrasco pudimos vivir uno de los grandes momentos de la noche, ya que tuvimos el placer de escuchar sus bulerías para Valencia, acompañadas de ‘Hay que vivir el momento’ y ‘Que bonito es querer’, canciones que son un grito de esperanza, que ahora es más necesaria que nunca.
David Bisbal no dudó en ondear la bandera de la Comunidad Valenciana para mostrar todo su apoyo a la población afectada, poniendo a todo el público en pie con un medley de sus grandes éxitos. Un momento en el que todo el público no pudo evitar bailar cada uno de los himnos que sonaron, al igual que el propio David, que, por supuesto, hizo varias veces su mítica vuelta sobre el escenario.
En el turno de Amaral, Eva salió al escenario y recordó a Juan, quien tuvo que ausentarse por problemas familiares. Aún así, hizo una actuación estelar, acompañada únicamente por un piano, para interpretar ‘Sin ti no soy nada’, una canción que provocó las lágrimas de muchas personas que se encontraban en la pista.
Por su parte, Rozalén protagonizó uno de los momentos más especiales de la noche, ya que quiso recordar a su localidad natal, Letur, vistiendo una camiseta en su honor e interpretando uno de los temas que refleja su infancia a la perfección.
Dani Fernández fue uno de los encargados en cerrar una noche en la que la música que nos une fue la protagonista, haciendo parada tras arrancar su recién estrenada gira ‘Esto es una jauría’. Su pop rock pusieron a saltar a todo el público, poniendo el broche de oro a una velada mágica.
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