A pesar de los obstáculos, Melendi persistió para que le tomaran en serio y encontró en su música una vía de escape y un altavoz para lanzar determinados mensajes. A día de hoy, su álbum, ‘Que el cielo espere sentao’, contiene lecciones sobre la igualdad que sirven como referente.
En el tema Cuestión de prioridades lanzada en 2005 enumera algunos de sus deseos para el mundo y dice, literalmente:
Y que la falda sea tan corta como quieras
Que el problema es del que mira y no encuentra explicación
Ese mismo álbum contiene una canción muy conocida que se llama Novia a la fuga y en ella admira a una chica por huir de una relación tóxica poco tiempo antes de casarse.
Y escapó del hombre que había hecho de ella una mujer sin nombre
Y en la vicaría los suegros lloraban, los padres reían Porque fue la más bella novia a la fuga jamás concebida
La estrategia fue impecable si lo piensas. Melendi supo crear un estilo de rumba propio e identificable, fusionando elementos del pop y el rock con influencias flamencas. Y encima a la vez, las letras te hacían reflexionar sobre un tema de una forma tan pegadiza, que sin darte cuenta, tenías una opinión.
En uno de sus éxitos, El informe del forense va más allá. «Con toda su fuerza» cuenta un caso de violación y su asesinato. La forma en la que no se la tomó en serio a ella por haber hecho uso de las drogas, desgarra.
Y el informe del forense dice que no hay violación
Que no hay pruebas de que aquel hombre la bajara el pantalón Y el secreto de sumario, ya cerró la investigación Porque encontraron pinchazos en el brazo
También en Hasta que la muerte les separe habla de nuevo de otra relación de maltrato. El terror de ella es narrado por el asturiano. Además, menciona la justicia, la cuál le ha dado de lado a ella. Hasta tal punto que solo ve como solución la inviable.
Marido y mujer hasta que la muerte los separe
Y ella espera llegue de su mano Porque solo así podra devolverle parte del daño Porque fué a la ley y la ley le dió del otro la’o No son suficientes los mora’os Ni segar al cero su amor sincero pa condenarle
Hablar de icono feminista son palabras mayores y una responsabilidad compleja. Pero Melendi sí es ejemplo de muchas cosas, una de ellas es como cantautor. Se libera del sexismo para tratar el despecho, el desamor y cualquier tema del que vemos que es fácil caer como artista.
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