Manolo García es ese artista que en cuanto saca gira, tienes rodeado en el calendario el día del concierto. El exvocalista de El Último de la Fila es un icono hasta para otros grandes cantantes. Con el talento de la vieja escuela y la ilusión de los más jóvenes, sus conciertos son terapia para el alma.
Este año en el que esta casa cumple 100 años coincide con la gira ‘Cero Emisiones Contaminantes desde Ya’ del artista. Y si algo parece confundir es imaginar la radio sin la música de Manolo García. Es fácil perder la cuenta de los años que llevan sonando sus himnos. El catalán con nombre más manchego le ha cantado a la libertad, al tiempo, a la soledad y al amor, entre otros.
Su estilo es inconfundible y hace que parezca fácil entender algunos sentimientos mediante la poesía. Elegir solo cinco canciones es tarea difícil, pero estos algunos de los temas que se han convertido en himnos de la música en español.
A veces, que no está de mas recordarlo, esta canción anima a vivir con más intensidad. Pájaros de barro es uno de sus canciones más queridas y es que combina a la perfección el pop-rock con detalles flamencos.
Esta canción incita a la aventura y al escapismo. Es un tema recurrente para el artista la fugacidad de los buenos momentos. Con A San Fernando un ratito a pie y otro caminando las letra transmite el deseo por dejar atrás la rutina y conocer otras tentaciones.
En esta canción la frustración se adueña del artista. Un giro teatral es la expresión a los cuatro vientos de que no comprende a su pareja. Una oda al desahogo y es que cuestiona hasta su papel en la relación. Qué culpa tiene él por el comportamiento y la personalidad de su pareja.
A la perfección, Manolo García describe en Niña Candela lo prendado que queda ante los movimientos de ella. Ella es una bailarina que ha enamorado al artista. Sutileza y belleza como la de una flor. Su brillo lleva al intérprete a imaginarse lo feliz que sería con solo una noche con ella.
Esta es una de las canciones más pedida en sus conciertos. Nunca el tiempo es perdido habla del anhelo que causa un amor perdido que no ha salido bien. Consigue que entiendas lo que siente cuando esa persona no está en su día a día.
Sabe darle una vuelta al punto de vista a lo que siempre se ha dicho del tiempo. Si cada uno se encuentra en un camino, no hay una pérdida de tiempo porque es lo que necesitan para encontrarse. Cuando no hay egos, ninguna distancia es una pérdida de tiempo.
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