Maica rompe a llorar tras conocer las verdaderas intenciones de Tomasso
La concursante sufre mal de amores al saber que el italiano de 'Grande Fratello' la quiere como amiga
La concursante quedó encantada por el italiano con su visita a ‘Grande Fratello‘, pero éste ha terminado de meterle en un buen drama tras darle a conocer que sus únicas intenciones con ella eran las de la amistad. Unas confesiones que a la murciana han pillado por sorpresa y que, definitivamente, no le han sentado del todo bien.
El concursante italiano lo ha llegado ha confirmar incluso en tres ocasiones al percatarse de las intenciones de ambos programas por forzar una historia de amor que, para él, no tiene lugar. Tomasso, a pesar de días atrás dar lugar a ese cuento de hadas confesando que echaba de menos a la española e incluso llorando con su salida, ya tiene su historia en la casa italiana con otras de las concursantes, María Vittoria. «La he besado, hoy la he besado. Era un día soleado y todo estaba bien y he dicho: ¿Por qué no?» confesaba el concursante tras dar lugar a la ‘carpeta’ italiana. Aun así, Tomasso ha decido omitir esta parte en su conversación con Maica y ha optado por simplemente confesarle sus sentimientos hacia ella.
El gran chasco de Maica
Ha sido Adrián el encargado de informarle de la situación a la concursante tras escuchar una conversación del italiano con Laura, donde daba a entender que todo había sido un malentendido. Unas confesiones que dejaban rota y con una gran tristeza a Maica que comentaba sentirse ridícula: «Quiero que me trague la tierra ahora mismo, me siento ridícula. Y yo creyéndome los vídeos»
Horas más tarde decidía plantarle cara a Tomasso para resolver sus dudas y aclarar lo sucedido: «Tú me dijiste en Italia que te gustaba. Y luego aquí, que había una conexión, que si no, no estarías aquí. Que te encanto, pero que aquí querías ir un poco… Me pareces un cucaracho. Me dices cosas que no son ciertas y a mis compañeros les has dicho otras cosas. A mis compañeros les ha dicho que no sabías cómo decirme que no te gusto y a mí ya se me ha ido la conexión«. A lo que el italiano se defendía: «Les he dicho a tus compañeros que si te hubiese encontrado fuera, no sería la misma cosa. No soy un cucaracho. Yo nunca he dicho que estaba enamorado. Ese me gusta que dije puede significar muchas cosas. Es como si digo que a mí me gusta Ruvens, me gusta Óscar«.
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