Jorge Javier Vázquez en 'Supervivientes 2024'

Jorge Javier se enfrenta a un pérdida muy dolorosa en su vida: «No sé qué hacer conmigo»

El comunicador se ha tenido que despedir de Lima tras doce años a su lado

Nuria Miguelez

Impactante golpe para Jorge Javier Vázquez. El presentador se encuentra completamente abatido después de despedirse de Lima, su galga favorita, con quien compartió doce años. El conductor de Supervivientes, ha decidido expresar su adiós de manera pública mediante una conmovedora carta.

«El jueves por la noche se nos fue Lima. Lima era la mía. Mi galga. Fue la primera que adoptamos en común P y yo», comienza el texto haciendo referencia a su expareja. «Así que la marcha de Lima, después de doce años con nosotros, nos ha dejado un poco para el arrastre«.

No obstante, el presentador ha recalcado que «Lima sigue estando con nosotros pero de otra manera. Prefiero pensarlo así. Llega una edad que todo te sirve para seguir levantándote«. A través de estas líneas, el de Badalona se ha sincerado para confesar que está completamente abatido por la pérdida: «Me duelen los ojos. Doce años juntos, Lima. Doce años, que se dice pronto. A lo largo de este tiempo me he separado, he querido ser actor, cantante y a veces escritor. Era presentador. Pero ahora, por encima de todas esas cosas, lo más importante de todo es que ya no estás».

Los últimos instantes de Jorge Javier con su fiel compañera

Jorge Javier ha compartido la dificultad de estos días recientes y cómo tuvo que enfrentar la dolorosa realidad de despedirse de su adorada mascota. A pesar de presenciar durante dos meses los desafíos que Lima superó y de no hacer caso a las advertencias de P. sobre la edad avanzada y la delgadez de Lima, la pérdida de la galga el jueves pasado lo dejó completamente devastado.

«El jueves por la noche, al preparar las cenas, Lima no apareció. Y eso que cuando había movimiento en la cocina era la primera que se manifestaba. La encontré tumbada en el sillón. Como la otra vez. Con dificultad para respirar», relataba. «Le cogí la cabeza entre mis manos y nos miramos a los ojos, como tantas veces habíamos hecho a lo largo de estos doce años. La acaricié, le dije guapa. Volví a acariciarle la cabecita hasta que en un momento escuché ‘Ella ya no está’. Y aparentemente todo acabó».

En un intento de superar de la mejor manera posible este golpe doloroso, el presentador ha redactado esta carta como una despedida emotiva a su leal amiga.