Cómo afrontar la fatiga mental, el síntoma más ignorado de la menopausia

La buena noticia es que es pasajera

Ana Más

Sofocos, aumento de peso, cambios de humor, sequedad e incluso ansiedad, seguro que todos estos síntomas te resultan conocidos si estás pasando por la menopausia, pero no son los únicos. Seguramente también notes pequeños olvidos o más dificultad para concentrarte, se trata de fatiga mental y es otro de los síntomas que podemos notar durante esta época.

Y es que entre otras cosas la bajada de estrógenos que se produce en esta época de la vida,  ocasiona que el cerebro cambie, ya que estas hormonas, «no sólo contribuyen a mantener la vascularización cerebral o actúan como protectoras ante las enfermedades neurodegenerativas. Sino que también están involucradas en el funcionamiento de ciertas habilidades cognitivas», explican desde welife.com.

En declaraciones al mismo medio el psicólogo sanitario Buenaventura del Charco describe la fatiga mental como, «un cansancio extremo de origen cognitivo que suele ir acompañado de dificultad para llevar a cabo ciertos procesos mentales» y explica que esto a su vez puede provocar «irritabilidad, cambios de humor, alteraciones en el apetito, falta de energía, procrastinación,  ansiedad…».

La fatiga mental en esta época es pasajera

La buena noticia es que este tipo de fatiga se pasa con el tiempo, en la mayoría de los casos, se regula en un par de años después de que la menopausia haya llegado, sin embargo no debemos ignorarlo, ni normalizar la apatía y la somnolencia de las que llega acompañada, algo de lo que se lamenta la psicóloga Ana Sierra, colaboradora de Petit BamBou, que insiste en que sus consecuencias pueden resultar incapacitantes.

Los buenos hábitos en alimentación, deporte y sueño o las técnicas de relajación y respiración, son armas muy eficaces para prevenir y luchar contra la fatiga mental, además de la meditación, desde la app de meditación Petit Bambou, explican que «el escaneo corporal puede actuar como un masaje interior que relaja los músculos, la tensión y la mente».

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