Se habla mucho de Granada, de Jaén, de Bilbao y de Murcia, entre otras muchas ciudades que destacan por sus tapas. Sin embargo, según un artículo publicado por el medio El Periódico, la mejor calle para disfrutar de este manjar no está en ninguna de esas ciudades, sino en La Rioja.
Concretamente es en Logroño donde podrás disfrutar de una calle de 200 metros de largo para perderte y probar sus distintas tapas entre los más de 80 bares que hay. Se trata de la Calle Laurel, la cual se ha convertido en el epicentro del tapeo en España y ha ido ganando gran popularidad.
Es una calle llena de vida y no solo por la cantidad de establecimientos que la componen, sino porque a partir de las nueve de la noche se crea un clima y un ambiente único. Los bares sacan sus mejores pinchos y es imposible no caer en la tentación de probar uno o varios. Y lo mejor de todo no es eso, sino su precio. Por alrededor de los 2,30 euros puedes disfrutar de un pincho y una caña o en su defecto, corto de cerveza.
Cada uno de los más de 80 bares que componen la Calle Laurel destaca por su diversidad y su especialidad en cada plato. No obstante, si pides recomendación, el bar Blanco y Negro es considerado uno de los más antiguos de Logroño y destaca por su famosa tapa bajo el nombre de matrimonio compuesto por una anchoa, un boquerón y pimiento verde. Además, de este, el bar Soriano es famoso por sus champiñones con gambas y una salsa secreta que te deja con ganas de más.
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