Y es que aunque algunos beneficios de dejar el tabaco, como la mejora en el ritmo cardiaco y la respiración, se notan casi de manera inmediata, hay otros como reducir la posibilidad de sufrir cáncer, para lo que tendrán que pasar varios años desde que se deja de fumar. Esto es lo que se deduce de un estudio realizado en Corea.
Se ha publicado en JAMA Network Open y para realizarlo, «se ha examinado la evolución a lo largo del tiempo del riesgo de cáncer desde que se dejó de fumar, analizando más de 2 millones de coreanos de 30 años o más», explican desde 20Minutos.
Y es que según los expertos, los diez años siguientes a dejar de fumar, el riesgo de padecer cáncer sigue siendo elevado. Es en ese momento cuando comienza a disminuir y a partir de los quince años o más, el riesgo se reduce al cincuenta por ciento.
Pero esta no fue la única conclusión del estudio, del que se dedujo además que después de dejar de fumar, «el riesgo de cáncer de pulmón disminuyó tres años antes que el de otros tipos de cáncer» y que la edad a la que se deja de fumar también es relevante, disminuyendo más el riesgo si se deja antes de los cincuenta años.
Además, dejar el tabaco, conlleva muchos beneficios más para la salud, entre ellos mejora la calidad de vida, reduce el riesgo de muerte prematura, reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular y de enfermedad respiratoria y mejora la función pulmonar, entre otros.