Hace meses ya nos referimos a datos de la ANFAAC según los cuales hay «más de 9,3 millones de canes y algo menos de 6,7 millones los niños menores de 15 años, según el padrón de 2021″. Y es que muchas personas prefieren tener perros que niños e incluso reconocen querer a sus mascotas como hijos. Pero, ¿es posible esto, tiene una explicación científica?.
Pues los datos parecen apuntar a un SI, ya que según la I Encuesta de Bienestar Animal en España, realizada en el 2023, el 92,6 % de los participantes consideran que su mascota es un miembro más.
Pero hay más razones para creer que esto es así, la terapeuta ocupacional y coordinadora de la Cátedra Animales y Sociedad de la Universidad Rey Juan Carlos, de Madrid, Nuria Máximo explica en lavozdegalicia.es que el vínculo que se genera entre humanos y perros no se diferencia del que se puede crear entre personas. «Se basa en los mismos mecanismos que funcionan para vincularnos con otros congéneres», matiza.
Y añade que «las actividades y tiempo compartido, sumado a la complicidad, a la confianza, a la comunicación y al respeto son el hilo conductor que irá tejiendo un vínculo seguro y de unión muy difícil de explicar para quien nunca lo haya experimentado«. Pero la cosa va más allá, en caso de enfermedad o fallecimiento el dolor que se experimenta es similar al que se sentiría por la pérdida de un miembro de la familia. Y esto, según explica al mismo medio el presidente de la Sección de Psicoloxía e Saúde del Colegio Oficial de Psicología de Galicia, Xacobe Abel Fernández, no lo entiende siempre ni lo ve con buenos ojos la sociedad.