Hoy mismo se estrena en Caixaforum+, el documental ‘Mapa a Mandataria’, un proyecto que han creado la actriz Cayetana Guillén Cuervo y el bailarín y coreógrafo Chevy Muraday, que además de documental es una obra de teatro y danza y ‘un movimiento global’.
Lo han llamado así en referencia a un lugar al sur de Nápoles dónde mandaban a los ‘excluídos y rechazados de la sociedad’ en especial a las mujeres «exiliadas, rechazadas, cuestionadas, olvidadas». En la época del dictador Mussolini, ya con el nombre de Ventotene, «quedó como cárcel de mar para los disidentes políticos y sus esposas», explican desde El Confidencial.
En él, la actriz ha contado un terrible secreto con el que ha vivido desde los seis años, ‘una fuerte agresión sexual’, que vivió en su propia casa un sábado que sus padres habían salido. La intérprete ha tardado más de 48 años en hablar de ello y ahora lo cuenta en el documental porque ha querido ser justa con sus compañeros: «Nunca he hablado de ello porque nunca he querido que estuviera en primera línea de mi vida, pero sentí que tenía la responsabilidad de hacerlo con todo mi elenco», explicaba. Y añadía, «Por lo tanto, si sirve de referente y ayuda, pues ahí está, pero como uno más. Lo que pretendo es decir: a todos nos pasan cosas y a mí también, pero es un ejemplo de que la vida sigue y sigue bien chula».
Cayetana Gullén Cuervo lo define como un movimiento global
El documental habla del proceso de creación de una obra de teatro que ha montado junto a Chrevy Muraday y que llega a los Teatros del Canal el 14 de febrero tras estrenarse en el Festival de Mérida del año pasado. Un montaje en el que, «Contamos nuestras heridas para que sirvan de ejemplo: te puedes levantar y seguir y sonreír y hacer lo que te gusta en la vida y llegar muy alto. Todos los miembros de este elenco han alcanzado su sueño y han superado su propia historia», ha explicado.
El rapero Elio Toffana, los bailarines Chus Western, Basem Nahnouh, La Merce, y también la actriz Gemma Cuervo, su madre, van contando a través de sus propias historias de superación, el proceso de creación de la obra: «Son personas que vienen de la mierda y que se salvan a través de las artes escénicas, del arte y la cultura, de la comprensión de los demás», explica la actriz a El Confidencial.
Y añade ‘todos hemos sido pandatarios en algún momento’, señalando que cualquiera puede formar parte de esta comunidad, que define como “un movimiento global” que busca ‘abrazar a todos los excluidos’ y al que se puede unir «cualquiera que haya sufrido desprecio, rechazo, bullying, ghosting… «.
