Se podría decir que fue un aviso de lo que vendría en las siguientes décadas y que transformaría para siempre el panorama musical internacional. Cuando Shakira lanzó su primer sencillo, lo hizo con un grito potente: Estoy aquí. Con esta canción, la joven colombiana anunciaba al mundo que había llegado para quedarse, que estaba destinada a hacer historia. Y así lo hizo. Con el tiempo, Shakira se convertiría en uno de los iconos más grandes de la cultura popular.
Han pasado 12 álbumes de estudio desde ese primer grito al mundo, cada uno contribuyendo a cimentar una de las carreras más galardonadas de todos los tiempos. Pero antes de ser la artista latina más premiada de la historia, antes de ser el modelo a seguir para bailarines y cantantes por igual, ¿quién era Shakira? ¿Qué la convirtió en la leyenda que es hoy?
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La historia comienza en Barranquilla, Colombia, donde Shakira Isabel Mebarak Ripoll, nacida en 1977, parecía destinada al éxito desde el principio. Hija de William Mebarak Chadid, un escritor libanés que emigró a Colombia, y de Nidia Ripoll Torrado, de ascendencia catalana, Shakira llegó al mundo con un talento innato. Su nombre, de origen árabe, significa «gracias», un reflejo quizás de lo que ella misma traería al mundo con su música.
Desde que era muy pequeña, la vida de Shakira estuvo marcada por la música, la danza y la creatividad. A los ocho años, ya componía sus propias canciones, mostrando un talento precoz que pocos podían ignorar. Empezó a aparecer en programas de televisión y en espectáculos en vivo, donde su desenvoltura y carisma en el escenario eran innegables. El escenario, desde entonces, se convirtió en su hogar, un lugar donde se sentía completamente en su elemento.
Su primer álbum lo compuso con 8 años
A los 11 años, en una de sus primeras apariciones públicas, Shakira confesó que su primer amor había sido la danza árabe, una pasión que descubrió a los cinco años: «Toda la vida me ha gustado más el baile, el canto lo descubrí hace tres años» comentó en ese entonces, mientras su larga melena oscura enmarcaba su rostro juvenil. Con una madurez inusual para su edad, ya mostraba una seguridad impresionante ante las cámaras y hablaba de su «vena artística» que la había llevado a explorar distintas formas de expresión desde muy pequeña: «Si no bailaba, pintaba, y si no pintaba, hacía otra cosa».
Incluso en esos primeros años, Shakira ya tenía claro que su educación era tan importante como su pasión por la música. «Yo no descuido mis estudios en ningún momento. Hago cada cosa en su lugar y a su momento», declaraba con una firmeza que sorprendía a quienes la escuchaban.
El camino hacia el estrellato no fue fácil. A los 14 años, Shakira lanzó su primer álbum, ‘Magia’, en 1991, un proyecto que recopilaba nueve canciones que había compuesto desde los ocho años, junto con algunas de otros autores. Sin embargo, el disco vendió apenas 1200 copias, lo que en términos comerciales fue un fracaso. Pero Shakira no se desanimó. Este primer paso fue solo el comienzo.
A diferencia de la cinta grabada que habían escuchado, su interpretación en vivo dejó una huella en los ejecutivos, quienes no dudaron en firmar un contrato con la joven artista.
El camino al estrellato internacional estaba lleno de obstáculos, pero Shakira no desistió. Después de ‘Magia’ y un segundo álbum titulado ‘Peligro’, el éxito finalmente llegó con su tercer disco, ‘Pies descalzos’, en 1995. Este álbum, en el que trabajó con el productor Luis Fernando Ochoa, vendió más de 4 millones de copias y se convirtió en uno de los discos más importantes del pop latino. No tardó en coger carrerilla y hacerse con las estatuillas más cotizadas.
A pesar de una trayectoria llena de éxitos y de una identidad artística tan fuerte, Shakira sigue siendo humilde y enfrenta cada desafío con la misma valentía que mostró al principio de su carrera. En una entrevista para CNN en español, confesó: «Siempre tengo miedo, es una cuestión natural en mí, pero también tengo las ganas de superarlo». Hoy, Shakira sigue siendo un ícono que ha hecho historia en la música, transformando sus miedos y experiencias personales en arte, y continúa regalándonos momentos memorables que perdurarán en el tiempo.
