La Dirección General de Tráfico (DGT) se ha propuesto hacer un cambio en el Reglamento General de Circulación para velar por una seguridad más optima en todos los conductores. Asimismo, desde el pasado verano se han aprobado nuevas señales que se han ido implantando en las carreteras y calles poco a poco. De hecho, Ana Blanco, subdirectora adjunta de circulación en la DGT, ha explicado la importancia de este cambia ya que «recoge el cambio en la movilidad hoy».
Son varios los motivos que han llevado a la DGT ha hacer estos cambios. Algunos de lo más destacados es la introducción de la tecnología en los vehículos, así como «responder a las peticiones de ayuntamientos y el Parlamento sobre la adecuación de la señalización del tráfico a los nuevos aspectos tecnológicos» y respetar las nuevas regulaciones como las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).
Así es la nueva señal de la DGT
En numerosas ocasiones se han hecho estudios sobre la importancia de que la señalización en la carretera sea adecuada. De hecho, según ha rescatado en Infobae, un estudio señala que la señalización es «la tercera mejor medida de seguridad vial».
Esto ha llevado a la DGT ha implantar nuevas señales como es la del carril reservado para vehículos con alta ocupación. Con esta se pretende indicar que uno o varios carriles está destinado de manera exclusiva a la circulación de vehículos de gran tamaño. Asimismo, en la propia señal se indica el número de personas a partir de las cuales se considera de alta ocupación.
Nueva señal de la DGT
Si el carril o carriles está reservado no solo a VAO sino también a otro u otros tipos específicos de vehículos, se podrán combinar las imágenes correspondientes del mismo modo que en la señal S-51a
Puesto que esta nueva señal implantada por la DGT afecta también a los carriles VAO, cabe especificar qué es. Así pues, se trata de un carril en el que solo pueden circular vehículos con más de un viajero.
El objetivo es disminuir el número de turismos que circulan por la carretera, priorizando aquellos con alta ocupación de manera que se animen a los ciudadanos a compartir coches, siempre que sea posible, y dejen de desplazarse cada uno con el suyo propio. De esta manera, se reduce la contaminación y el impacto medioambiental.
