En la tertulia inicial de ‘TardeAR’, los colaboradores no tardaron en cuestionar la postura de Alejandra Rubio. Especialmente, Antonio Montero hizo hincapié en una aparente contradicción al recordar que Terelu Campos había mencionado en ‘De Viernes’ que su hija había aceptado la exclusiva principalmente por motivos económicos. Esto contrastaba con las palabras de Rubio, quien había afirmado que no lo hacía por dinero.
Luis Pliego fue claro y directo: «Es que ha vendido una exclusiva igual que todo el mundo, claro que lo ha hecho por dinero». La falta de coherencia fue también señalada por Miguel Ángel Nicolás, quien se preguntaba: «¿Es que cuál es la diferencia cuando dice que ella no vende su vida igual que los demás?». Paloma Barrientos añadió que la realidad del trabajo de Rubio en la televisión es ser parte del espectáculo y tratar temas personales, sugiriendo que lo admitiera sin más vueltas: «Alejandra está trabajando en televisión donde se habla de personajes, de cosas buenas y malas, podría decir si he hecho esta exclusiva y ya está».
En una emisión posterior de ‘SalseAR’, las críticas se hicieron aún más duras. La presentadora Ana Rosa Quintana introdujo un segmento donde se analizó cómo Rubio había respondido a sus críticos en otros programas. «Ha repartido a diestro y siniestro», observó Quintana antes de mostrar cómo Rubio se defendió de los comentarios de Alessandro Lequio, Alexia Rivas y otros colaboradores.
Luis Pliego y Paloma Barrientos destacaron la falta de humildad en la actitud de Rubio. Pliego insistió: «Es que le falta humildad», mientras que Barrientos señaló: «Ha estado soberbia», especialmente cuando Rubio comparó su trayectoria con la de su abuela, María Teresa Campos, quien tampoco estudió periodismo. Además, Miguel Ángel Nicolás introdujo un vídeo que dejaba a Alejandra Rubio en una posición comprometida. En él, Rubio criticaba a su primo José María por dar una exclusiva, a pesar de que ella misma estaba en medio de una polémica similar. Incluso Marta López, que había intentado defender a Rubio, tuvo dificultades para justificar sus palabras después de ver el vídeo.
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