El Doctor Michael Greger es un investigador experto en nutrición y toda una autoridad en este campo. Su forma de explicar los conceptos científicos más complejos con sentido del humor, ha sido alabada y es conocida por muchos. Por ejemplo, explica que las células de nuestro organismo son como pilas recargables en miniatura y habla de una proteína llamada AMPK muy relacionada precisamente con la energía.
El experto explica que cuando la batería se agota necesita más energía y es entonces cuando el organismo activa esta proteína (AMPK), que define como «el sensor de energía maestro» y que es la encargada de ordenarle al organismo que queme la grasa necesaria para obtener la energía que necesita.
En su libro «Comer para no engordar (Ed. Paidós)», explica que «si consiguiéramos hiperactivar esta proteína, el organismo quemaría más grasa» : Algo que no es nada sencillo, ya que las dos maneras de activarla son el ejercicio físico y el ayuno y en ambos casos el cerebro reacciona «enviando señales de hambre, lo que lleva a comer de nuevo para reponer las reservas de grasa», explican desde Clara.
Cómo activar la AMPK en nuestro organismo
Aunque es difícil no es imposible activarla, para ello el experto da una serie de consejos:
Ingerir dos cucharaditas de vinagre antes de las comidas principales, diluido en agua o en ensalada. Además el vinagre, «ayuda a evitar la sensación de hambre y a mantener los niveles de energía ya que evita los altibajos de glucosa en sangre»
Asegurarnos de tomar magnesio, necesario para que las células produzcan energía. Este mineral está presente en las verduras de hoja de color verde oscuro, las legumbres , los frutos secos, las semillas, los cereales integrales, el cacao y los lácteos.
Tomar suficiente cantidad de proteína, ya que la falta de estas es uno de los factores que frena el metabolismo. «Se suele recomendar un consumo mínimo de 0,8 g de proteína por kilo de peso. Es decir, si se pesa 60 kg, el consumo diario sería de 48 g», explican desde el mismo medio.
Pero activar la AMPK puede hacer que aumenten las ganas de comer, para contrarrestar esto el médico recomienda la nicotina, pero que nadie se asuste, no estamos diciendo que empieces a fumar. Determinados alimentos como las berenjenas, las patatas, los pimientos o los tomates, contienen nicotina.
Además masticar bien, ya que según algunas investigaciones «cuanto más se alarga una comida, menos alimentos se consumen antes de que el cerebro dé la señal de saciedad y se inhiba el hambre, incorporar las semillas de chía y lino que el médico describe como alimentos quitahambre. Además de el comino o el azafrán, que también tienen un efecto inhibidor del apetito y «contribuyen a la pérdida de peso y a la reducción de la grasa abdominal».