No cabe duda de que una de las cosas en las que más hemos notado la inflación los ciudadanos es en la cesta de la compra. Desde Activos, se refieren a «un estudio detallado realizado por el banco alemán Raisin que ha mostrado que, en promedio, los precios de losproductos alimenticios esenciales han aumentado un 71% desde 2019 hasta 2024». Un análisis basado en datos reales «de precios obtenidos de páginas de supermercados a través de una herramienta que permite comparar precios actuales con los de años anteriores», explican. Hoy hablamos de algunos alimentos que empiezan a bajar de precio.
Pero aunque los precios han ido encadenado subidas mensuales casi sin parar, hay algunos productos que ya empiezan a ser algo más baratos. Una caída que no afecta a todos los productos ni es demasiado grande pero que indica que « la situación empieza, al menos, a normalizarse«, explican desde 20Minutos.
El dato del Instituto Nacional de Estadística (INE) confirma que «el Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó en septiembre hasta el 1,5% anual, ocho décimas por debajo del dato de agosto. Es, a su vez, la cifra más baja que se registra desde marzo de 2021«, explican desde El Economista.
Más alimentos que empiezan a bajar: fruta, legumbres y pescado
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Y es que: «en septiembre hacer la compra era un 1% más barato que el máximo de precios alcanzado en abril de este año. En el último trimestre (julio a octubre) el precio de los alimentos ha encadenado tres bajadas mensuales consecutivas…».
El aceite de oliva encabeza la lista de los alimentos que han bajado, ya que se ha abaratado un 14% en solo cinco meses. Además la fruta, las legumbres y las hortalizas frescas, el pescado o la pizza, también están por debajo del máximo alcanzado estos años, explican.
Desde el mismo medio se refieren también a la oscilación de los precios de los alimentos. Los alimentos no elaborados son en los que los precios varían más por motivos estacionales. Por ejemplo la fruta o el pescado fresco suben o bajan en periodos muy concretos. Sin embargo en el caso de los alimentos elaborados, estas variaciones son más predecibles.
Sin embargo no todos los alimentos cuestan ahora menos que el punto máximo que alcanzaron durante la crisis: «De hecho, una de cada cuatro de las categorías de alimentos a los que el INE hace seguimiento siguen registrando precios récord», explican, aunque sus precios aumentan de maner muy moderada.
Según los últimos datos de IPC publicados por Eurostat en nuestro país hay quince alimentos que han bajado su precio con respecto a hace un año y se refieren también al número de productos en los que la inflación supera todavía el 2%, en España son 18 y la media en Europa es de 23.
Aunque parece que los altos precios que ha dejado la crisis inflacionaria se van a quedar en la mayor parte de los casos, explican y añaden que los consumidores seguiremos sufriendolo porque los salarios han crecido sustancialmente menos en comparación. Y señalan que lo que se espera ahora es que los precios «suban a ritmos más cercanos al 2%, que es el objetivo que se fijan la mayoría de bancos centrales del mundo». Lo normal en una economía sana y en crecimiento «es que los precios del consumo tiendan a subir de manera generalizada, aunque moderadamente», explican.
