El requisito indispensable en España para poder circular de manera legal con nuestro coche y que se debe pasar anualmente, una vez superado los 4 años de matriculación, tiene los días contados. El avance de la tecnología de los últimos años y la manera de gestionar toda la información, ahora también ha llegado a la conducción.
A partir de 2024 podremos decir adiós a este distintivo que todos los conductores llevan en el lado derecho del parabrisas de su vehículo. Así quiere establecerlo la Dirección General de Tráfico, marcando un antes y un después para todos.
La principal idea para mantener toda la información sobre la vigencia de la ITV será volcarlo de manera automática a un sistema donde tanto autoridades como propietarios de vehículos puedan acceder a toda la gestión. El principal objetivo será agilizar toda la gestión administrativa vial.
Asimismo, esto también traerá consigo varias ventajas. Entre ellas, eliminar la pegatina del ITV reducirá los gastos de producción distribución. Por otro lado, al integrar todos los datos a las plataformas digitales hará que los conductores puedan acceder fácilmente a la información sobre su vehículo en cualquier momento, sin necesidad de desplazarse hasta las oficinas o talleres.
Por consiguiente, otra ventaja a destacar es la capacidad que tendrán las autoridades a la hora de llevar a cabo los controles. Así pues, con un control digital centralizado, se podrá verificar la validez de la ITV y podrá hacerse de manera más rápida y precisa. Esto es el resultado de una mejora en la seguridad vial.
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