Esta vitamina que seguro tienes en tu nevera puede acabar con el mal aliento

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La halitosis, o lo que es lo mismo, que te huela el aliento, es una patología además de incómoda bastante habitual. Según un informe publicado por la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA), hasta un 30% de la población adulta sufre de halitosis y esta suele producirse por una mala higiene bucal o por problemas digestivos. Pero hay una tercera causa que puede provocarla: la alimentación.

«El mal aliento es producido a raíz de las bacterias en la boca y en la superficie de la lengua. Estas bacterias al descomponerse, producen compuestos volátiles sulfurados (CVS), que desprenden un olor fétido y molesto», explican desde la web dental.imedhospitales.com.

Las caries dentales, la gingivitis y la periodontitis, que afectan a las encías, la falta de hidratación y consiguiente sequedad bucal, el estrés, el tabaco y algunos medicamentos también pueden causar mal aliento.

Vitamina C contra la halitosis, estos son los alimentos que la contienen

Pero como adelantábamos, la alimentación es otro desencadenante de la misma. Alimentos como el café, el alcohol, las cebollas crudas, el ajo o el repollo pueden hacer que nuestra aliento huela mal.

Aunque es obvio, una de las mejores soluciones, indican desde imedhospitales.com, es «mejorar y reforzar los hábitos de higiene bucodental, con un estricto cepillado diario, no sólo de las piezas dentales sino también de la lengua, donde también se acumulan bacterias, es de vital importancia para evitar la aparición de halitosis». Además de incluir el uso de hilo dental para eliminar restos de comida acumulada en los espacios interdentales, y terminar utilizando un enjuague bucal.

Pero hay una vitamina excelente para prevenir el crecimiento de bacterias en la boca y que además previene las infecciones en las encías, algo que también minimiza el mal aliento, explican desde 20 Minutos. Se trata de la vitamina C que «lo que hace es crear en nuestra boca un medio ambiente inhóspito para las bacterias».

Las hortalizas más ricas en ella son el tomate, el pimiento rojo, el brócoli, las coles de Bruselas, las espinacas, el repollo y la patata. Pero también muchas frutas, además de la naranja, son ricas en ella, entre ellas la fresa, la frambuesa, el kiwi, el caqui, el melón, la sandía, el pomelo y la papaya.