Durante muchos meses, la exconcursante de ‘Supervivientes’ ha puesto toda su ilusión en este nuevo inmueble y durante muchas semanas hizo viajes de ida y vuelta Madrid – Valencia para conseguir decorar a su gusto su nuevo hogar. Allí ha conseguido el hogar de sus sueños donde ya comparte su rutina con Fabio Colloricchio y Gala, su primera hija.
Lo que no se esperaba Violeta es que, tan solo unos meses después de instalarse y conseguir poner todo en orden, recibiría «una oferta muy suculenta» por este chalet. Una propuesta que llegó a reconocer que se había planteado.
Sin embargo, pese a las dudas, la valenciana ha recurrido a las redes sociales para compartir que ya ha tomado una decisión al respeto y que ha decidido «no vender mi casa».
Tras dar esta noticia ha querido explicar los motivos que le han llevado a decir no. En primer lugar, la joven ha explicado que está encantada con su casa y pese a que sabe que estas cosas hay que verlas como «inversiones», le apetece «disfrutarla un tiempo».
No obstante, Violeta se ha querido mostrar tan natural como siempre y ha reconocido que cuando Gala empiece a ir al cole sabe que tendrá que tomar algunas decisiones que afecten a su vida. Pues cuando decidió irse a vivir a Valencia «no era madre ni pensaba que fuese a serlo a corto plazo».
A pesar de estar muy feliz por esta nueva andadura, ha reconocido que el trabajo de ella y el de su chico les hace estar viajando constantemente, por lo que cuando se separan lo pasan realmente mal. El problema vendrá cuando empiece a ser más consciente de la situación y su pequeña tenga que ir al colegio: «Ahí sí que tendré que tomar la decisión de volver a Madrid o quedarme en Valencia, para eso aún queda un tiempo, así que de momento voy a fluir».
Mientras hacia uno de sus típicos viajes Valencia – Madrid, Violeta ha lanzado a sus seguidores la opción de preguntas y respuestas. Entre las que le han llegado, los más curiosos han querido saber si tiene hipoteca y si podría desvelar cuánto le ha costado.
Si por algo se identifica la joven es por su sinceridad, así que sí, Violeta Mangriñán ha afirmado que «como la mayoría de las personas en este mundo que se compran un piso o una casa» ella también ha tenido que pedir un préstamo.
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