La exposición controlada al sol favorece la absorción de la vitamina D que fortalece nuestros huesos y dientes. El sol estimula nuestro sistema inmunológico, equilibra el colesterol, reduce la presión en sangre, afecta a nuestro estado de ánimo, mejora la calidad de nuestro sueño…
Sin duda, son muchas las cualidades positivas de la exposición al astro rey y ahora, debemos añadir una nueva: favorece e incrementa nuestros deseos sexuales.
Así lo han constatado científicos de la Universidad de Tel Aviv: tumbarse al sol incrementa notablemente nuestra libido. El portal Cell Reports se hacía eco de este descubrimiento. Aumentar la exposición al sol, de manera controlada y sana, estimula nuestro sistema que reacciona liberando mayores niveles de hormonas secuales. Algo que sin duda afecta a la pasión y el desenfreno.
El estudio realizado en Tel Aviv mide la exposición a la luz ultravioleta de un grupo de individuos, buscando su relación o no, con el deseo sexual de estas personas. Después de evitar el sol durante dos días y someter al grupo de estudio a una exposición de 25 minutos, el resultado fue contundente.
Tanto las mujeres como los hombres expresaban un aumento de su deseo sexual tras la exposición al sol. Algo que no sentían de esa manera en los días que no recibían los rayos ultravioletas del rey de nuestro sistema solar.
¿Sabías que…Los principales tipos de rayos UV que produce el Sol y que pueden afectar a nuestra piel son los rayos UVA y los rayos UVB. Hay que tener especial cuidado con los rayos UVB, ya que poseen más energía y son el origen de algunos tipos de cáncer de piel. Sin embargo, también los rayos UVB pueden dañar nuestra piel y causarnos lesiones o incluso cáncer.
Como resultado del experimento, la sangre de los individuos expuestos al sol presentaba mayores niveles de testosterona y otras hormonas implicadas en el deseo sexual, llegando incluso a afectar a la agresividad en varones.
Este hecho, el aumento de testosterona en varones expuestos al sol, no es nuevo para los científicos. Sin embargo, lo que no se conocía hasta este momento es el proceso químico que provoca estos cambios en nuestro organismo.
La proteína p53, responsable de la reparación del ADN de nuestra piel, es la que desencadena todo este proceso, estimulando la liberación de nuestras hormonas sexuales.
El estudio también se realizó en ratones con el mismo resultado. Los que fueron expuestos de manera controlada a la radiación solar, reflejaron un notable incremento en su deseo sexual.
En cualquier caso, recuerda: la exposición prolongada al sol puede ser perjudicial. Toma las medidas necesarias y disfruta de todos su beneficios de una manera sana.
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