El teletrabajo en España se ha reducido de forma notable en 2022, aunque con un leve crecimiento en el último trimestre del pasado año, situándose en un 12,5% frente al 13,6% del año anterior. Así lo ha detallado un informe realizado por el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI), un centro adscrito al Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
Pese a que pocas empresas ya tenían incorporado la modalidad del teletrabajo en sus oficinas años atrás, no fue hasta la crisis del coronavirus cuando este fenómeno se implantó de forma masiva. Ahora, tres años después, parece que las obligaciones y costumbres que nos dejó la crisis sanitaria están volviendo a cambiar.
Según el estudio, el teletrabajo es una modalidad que ha caído tanto para hombres como para mujeres. Alrededor del 12,6% de las mujeres (1.191.000 de trabajadoras) lo hacen a distancia, mientras que los hombres representan un 12,5% (1.372.000 empleados). Unos datos que según recoge el documento indican que la brecha de género se ha reducido respecto al año anterior.
El teletrabajo habitual, que nos dejó la pandemia coronavírica, ha descendido hasta un 7,9%, un 1,5% más respecto al año anterior que se situaba en un 6,4%. Hoy en día, el paradigma parece que ha vuelto a cambiar, pasando de 1.587.000 personas a 1.311.000. Aunque el teletrabajo ocasional ha crecido situándose en un 6,1% frente a un 5,7%.
En lo que a edades se refiere, el informe ha concluido que el teletrabajo está más extendido entre personas que son mayores de 25 años. De esta forma, los empleados de entre 35 y 54 años son los que más gozan de este privilegio (13,5%), seguidos muy de cerca por personas mayores de 55 (12,1%) y por personas entre 25 y 34 años (11,9%). Cifras que contrastan con la de los jóvenes de entre 16 y 24 años, ya que solo representan el 6,1%.
Con respecto a la edad de los empleados, el informe destaca que el teletrabajo está más extendido en personas mayores de 25 años. Así, los trabajadores de entre 35 y 54 años son las que más teletrabajan (13,5%), seguidos de las personas de 55 y más (12,1%) y las de entre 25 a 34 años (11,9%), alejados así de los más jóvenes de 16 a 24 años (6,1%). No obstante, el teletrabajo ocasional se ha consolidado entre los grupos de edad de 44 años e incluso de mayor edad.
Este estudio también ha extraído que los empleados que trabajan por cuenta propia representan hasta un 26,4% del total, triplicando en teletrabajo a los asalariados que sólo simbolizan el 10%. Asimismo, se ha observado un notable descenso del teletrabajo habitual y ocasional en los dos tipos de situaciones laborales.
El teletrabajo también presenta sus particularidades por regiones autónomas, siendo la Comunidad de Madrid la que encabeza la lista de personas que trabajan a distancia (19,1%), seguida muy de cerca por Cataluña (14,1%) y la Comunidad Valenciana (11,9%) en un contexto en el que la modalidad de trabajar desde casa se ha visto reducida en 12 de las 19 autonomías.
En el contexto europeo, España simboliza el 15,3%, una cifra que está muy por debajo de la media de la corporación (24%) según datos de Eurostat. En este sentido, Países Bajos es el país que más lo tiene implantado (53,8%), seguido de Suecia (46,2%) y Luxemburgo (45,1%).
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