Como cada jueves en El Hormiguero, se reúnen ante la mesa de actualidad Nuria Roca, Cristina Pardo, Juan del Val, Pablo Motos y Tamara Falcó. Pero, como suele ocurrir cada semana, ha sido la marquesa de Griñón la que ha acaparado toda la atención al hablar, cómo no, de su sonada boda con Íñigo Onieva.
La semana pasada el tema que se puso sobre la mesa fue el de si finalmente la hija de Isabel Preysler tenía vestido de novia o no. Ella respondió con un rotundo ‘sí’, añadiendo, además, que se había entusiasmado al ver el diseño de Carolina Herrera. «Todo era maravilloso. Me he sentido superesuchada», comentó entonces.
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— El Hormiguero (@El_Hormiguero) June 1, 2023
Pero en estos días ha ido circulando otra polémica que también rodea a Falcó y su esperada boda el próximo 8 de julio de 2023. En esta ocasión no ha sido un problema con su vestido, sino por las críticas que al parecer ha recibido la marquesa sobre su peso.
Todo surgió a raíz de las declaraciones citadas en Sálvame, donde los tertulianos aseguraron que la futura novia estaba siguiendo una estricta dieta de cara a la boda y que perseguía un objetivo: perder 15 kilos en 3 días. Sin embargo, la propia Falcó no tardó en desmentirlo todo. «Menuda tontería y falta de respeto. Yo estoy en mi ‘normopeso’«, declaró ante Vanitatis.
Por eso, la marquesa ha aprovechad su estancia en El Hormiguero para volver a responder a quienes la han criticado por seguir una dieta que no ha seguido y a quien se meten con su físico. «¿Se han metido contigo por tu peso?», quiso saber Pablo Motos.
«Están todo el día diciéndome que si voy a perder 10 kilos para la boda y yo ‘piérdalos usted'», soltó Falcó en el programa. «Mira, yo estoy en mi ‘normopeso’. Puedo estar más delgada o menos delgada, pero ¿por qué si el traje me lo están haciendo a medida tengo que perder peso? Pues no», dejó claro ella en tono divertido.
«Nadie le ha preguntado a Íñigo si quiere perder 10 kilos», remató ante el apoyo del resto de colaboradores de la mesa que hicieron un llamamiento al respeto a la hora de criticar el estado físico o mental de alguien. «De todas maneras, estoy viviendo un momento pletórico y todo lo que me dicen…«, añadió ella acompañando con un gesto de indiferencia.
Pero ahí no acabaron las anécdotas. Tamara Falcó ha vivido muchas situaciones surrealistas estos días y reveló otro momento de lo más estrambótico. «¿Os acordáis que hablamos aquí de la mala suerte el otro día?», empezó a decir ella.
«Pues no sé qué cadena fue pero…me mandó dos santeros a cas apara quitarme la mala suerte«, contó ella sin poder contener la risa. «Yo, de repente, abro a un Glovoo y digo ‘¿por qué huele a incienso?’ y me mandaron dos santeros a casa. Claro, imagínate; yo, echando agua bendita por todas partes y llamando a los sacerdotes preocupadísima», rió ella.
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