El pasado mes de abril. Rozalén realizó un viaje a Colombia con su compañera y fiel amiga, Beatriz Romero con un ONG llamada Entre Culturas. El fin con el que realizaban este viaje era para conocer y visibilizar algunos proyectos relacionados con la paz del país.
Al otro lado del charco, la manchega tuvo la oportunidad de poner rumbo a Cuba y cantar por primera vez allí en el Festival Internacional de Música: Cuba disco 2023, que tuvo lugar en La Habana.
Tras regresar de ese viaje tan inspiracional y nutritivo, la de Girasoles ha compartido en sus redes sociales una emotiva reflexión sobre lo que ha sido para ella esta experiencia.
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«Yo soñaba con ir a cantar a Cuba desde que hago canciones… Por el vínculo de tantos artistas a los que admiro, por la influencia, por el faro musical que es la música cubana para la sociedad… Por su formación cultural, poética, rítmica, vocal, instrumental… Por lo compartido con Omara Portuondo, Pablo Milanés, con tantos músicos de allá… Porque ‘Ojalá’ de Silvio fue de las primeras canciones que aprendí… Por las Habaneras que son hilos emocionales en mi familia, con la que me uní a nuestro desaparecido, con la que dije ‘adiós’ a mi abuela… «, comenzaba analizando todas las cosas que le había aportado a lo largo de su vida un país como Cuba.
Respecto a su primer viaje a la Habana, reconocía lo siguiente: «Hace seis años fui por primera vez a La Habana con el corazón hecho pedazos y allí me florecieron ‘girasoles’ y nos dieron lo poco que tenían. Porque la gente no puede ser más bonita ni enseñarte tanto en tan poco…«.
Durante su estancia a lo largo de estas últimas semanas, Rozalén nos contaba todo lo que han vivido y visto allí: «Hemos sido conscientes de la situación delicada del país: la crisis del carburante, las largas filas en la calle para comprar alimentos, la falta de medicamentos, la migración… Hemos visitado solares de La Habana Vieja y admirado la cruel belleza de los edificios en decadencia. Hemos dialogado, debatido, reído y llorado con quienes nos hemos cruzado». Tras esas palabras, la intérprete resaltaba lo siguiente: «Por esa razón nos han agradecido a cada paso que fuéramos a cantarles, a compartir con tantxs músicxs de lugares diferentes en el marco del CubaDisco. Y me regalasteis uno de los conciertos más emocionantes de mi vida… Y por esa misma razón también muchxs han volcado su dolor y su rabia hacia mí«.
«Qué difícil expresar cómo me siento, estas emociones encontradas, este esfuerzo por comprender y empatizar. Y, a pesar de todo, ‘reivindicar el espejismo de intentar ser uno mismo, ese viaje hacia la nada que consiste en la certeza de encontrar en tu mirada la Belleza’.Ensalzar las bondades del pueblo cubano por encima de todo«, escribía la artista.
Rozalén reflexionaba de la sobre todo lo el cariño que ha recibido en ese país: «No sabéis lo que os agradezco el amor y el cuidado recibidos… Cada gesto, detalle, aplauso, lágrima, abrazo. Merecéis todo lo bueno, por eso nos importáis«.
Para zanjar con la reflexión, la de Y busqué reflexionaba sobre la importancia de la música en estas culturas: «Las sociedades evolucionan. Viven mejores y peores momentos. Todo muta. Todo cambia. Pero la música es eterna. Gracias a ella todos sobrevivimos al paso y al peso de la Historia. De corazón: GRACIAS«.
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