Escuchamos ‘remedios caseros‘, y automáticamente pensamos que va a ser beneficioso para la salud. Sin embargo, no todos pueden ayudar a calmar ciertos síntomas.
Hay muchas opciones caseras para solucionar algún problema de la piel, el cabello, o incluso alguna enfermedad. Las afecciones como dolores de estómago o de cabeza son las más frecuentes.
Además, los dolores de muelas son tratados con muchos de los productos que se tienen en casa. Sin embargo, no todos son igual de seguros.
Según el portal Mejor con Salud, «en líneas generales los remedios caseros no deben ser un tratamiento de primera elección para las enfermedades. Si bien es cierto que algunos son inofensivos y pueden ayudar a calmar ciertos síntomas, otros son peligrosos porque en realidad no funcionan y generan efectos adversos».
Echa la vista atrás… lo más seguro es que hayas utilizado un remedio casero en algún momento este verano: vinagre para las quemaduras solares, un té de hierbas para un resfriado, algún aceite para aliviar un dolor de cabeza, jengibre en infusión para reducir el colesterol… Pero, en realidad, ¿cuántos te han funcionado?
Remedios caseros que no resultan favorables
Para calmar las quemaduras, uno de los remedios caseros que más se realiza es la aplicación de aceite o mantequilla. Sin embargo, es una locura, pues ambos ralentizan el enfriamiento de la piel y pueden favorecer la producción de bacterias.
No obstante, un truco casero que sí que puede ir bien es aplicar agua fría a la zona quemada. Otra alternativa puede ser colocar un paño húmedo y limpio. En el caso de que la lesión sea grave, es recomendable acudir al médico.
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Otra de las creencias caseras es que para secar los granos de la cara te apliques pasta de dientes. Aunque pueda ser que se logre el objetivo, este producto quema la piel, y puede terminar por surgir un mal mayor de enrojecimiento y descamación de la dermis.
Además, otro de los trucos caseros que pensamos que funcionan es aplicar multitud de sustancias al pelo para combatir los piojos. Uno de ellos es utilizar queroseno o gasolina para eliminarlos, pero son productos potencialmente tóxicos y por supuesto ineficaces.
La recomendación es utilizar medicamentos y pasar un peine fino por el cabello para eliminar las liendres.
