¿Qué supone este cambio de hora? El principal objetivo de los mismos es adecuar los horarios de los trabajadores con las horas de sol que hay en el día. En la traducción, esta práctica supone que el amanecer y la puesta de sol tengan lugar antes.
La puesta de sol se irá adelantando conforme llega el invierno. El hemisferio norte entra el miércoles, 21 de diciembre, en el solsticio de invierno. Para ser más exactos, la estación invernal comenzará a las 22:48 horas UTC (una hora menos en Canarias), según datos del Observatorio Astronómico Nacional
Esta modificación horaria se aplica en todos los países de la Unión Europea (UE), con la intención de ajustar la jornada laboral a las horas de luz natural.
El cambio de hora puede acarrear alteraciones en el descanso nocturno, por lo que debemos estar preparados para lidiar con ello. Es por eso por lo que tiene lugar en las madrugadas de sábados a domingos, tratando de evitar que afecte a la mayor parte de la población trabajadora.
Uno de los grupos más perjudicados por estos cambios son los niños. Estos pueden suponerles un desajuste del sueño y provocarles somnolencia o cansancio que pueden derivar en otros problemas más graves, por lo que es importante ir adaptándolos poco a poco.
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