Desde 20Minutos aluden al estudio ‘La gestión de la intimidad en la sociedad de la información y el conocimiento. Parejas y rupturas en la España actual (GESTIM-BBVA-2018)’, realizado por el profesor Félix Requena, de la Universidad de Málaga, del que se deduce que «las rupturas están ahora más presentes en todas las generaciones, lo cual favorece la vivencia de esta realidad con mayor normalidad que antaño».
Desde la web enpareja.com explican que algunos psicólogos argumentan que, «a quien le duele más una ruptura amorosa, es al que dejan más que el que deja, esto se debe a que ya hay un tiempo transcurrido en el que pensó y analizó lo que viene después de ese punto final a su historia de amor, mientras que la otra parte se queda en shock ante la situación.» Algo en lo que coincide la terapeuta zaragozana especialista en terapia basada en las emociones, Lola Fatás que en declaraciones a elmundo.es explica que «La persona que toma la decisión ya tiene el proceso de ruptura del vínculo más completado y enfrenta el duelo emocional más recuperado».
Para Mesa en general, «las mujeres sufren más inmediatamente después de la ruptura amorosa, pero se recuperan más rápido que los hombres, que tienden a hundirse, sentirse abandonados y en algunos casos, depresivos». Algo que apostilla Fatás también, «Tiran en piloto automático y, de repente, empiezan a notar los efectos emocionales y llega la caída».
Para Silvia Llop, conocida como «la psicóloga del amor», depende de la personalidad de cada uno y de la situación concreta. «Hay gente que considera que dejar es más complicado, porque se ponen en el lugar de la otra persona y les duele su dolor…. Hay otras personas que sienten que ser dejadas es lo peor que puede ocurrir, especialmente cuando no te lo esperas….», explica.
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