Y es que la salida de la presentadora se produjo «tras un momento de tensión en directo con Belén Esteban», provocada por un vídeo en el que se le acusaba de antivacunas, explican desde eltelevisero.huffingtonpost.es . Aunque fue una expulsión momentánea, ya que después fue readmitida por considerarse un despido improcedente. «Editaron mi video hablando del Covid. Yo no soy antivacunas, tengo todas las vacunas puestas», ha explicado.
La gaditana comenzó dejando claro que no le gustaría volver a presentar un programa como Sálvame del que dijo que había mucha división entre el equipo, «o estás con ellos o contra ellos», dijo.
Padilla recalcó que el tiempo pone las cosas en su sitio refiriéndose a que mientras ella sigue trabajando, el programa ha sido cancelado finalmente e insistió en que no volvería a un programa de ese estilo nunca ni siquiera por dinero. Reconoció además que estuvo durante mucho tiempo incómoda en el programa porque iba en contra de lo que ella piensa y explicó como a algunos de sus ex compañeros le había comido el personaje televisivo: » No sabes cuál es la persona y cuál es el personaje».
Pero la cosa no quedaba ahí, la presentadora reconoció que la de Sálvame fue una etapa muy dura y que incluso había presenciado como se «maltrataba a personas sin consideración ninguna», y como incluso en ocasiones tuvo que interceder por algunas personas, «Yo le decía a los directores: ‘¿pero no te da pena verla llorar?’ Y me decían: ‘anda ya’», explicó.
También habló sobre lo difícil que fue vivir la enfermedad y el fallecimiento de su marido junto a sus compañeros del programa, «No es bonito ir a un trabajo y no poder contar a tus compañeros que tu marido se está muriendo» , algo que hacía para protegerlo a él de todo, «soy popular y he entendido que hay ciertas cosas que no puedo hacer», explicaba. Tiene claro que ni quiere hacer daño ni quiere que le hagan daño. Y habló del negocio de las audiencias, ‘somos números, personajes, muñecos’, dijo.
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