Y es que una de las principales conclusiones del estudio es que los cafés molidos de marcas blancas son perfectamente comparables a los de las primeras marcas en aspectos como el aroma, el sabor, la intensidad o el color y suelen costar la mitad, es decir, en general estos cafés tienen una calidad muy parecida a los de las primeras marcas pero son mucho más económicos.
Se han analizado trece cafés molidos de tueste natural y doce de mezcla con torrefacto y las principales diferencias se han encontrado en la cantidad de cafeína y en el precio de venta.
La cantidad de cafeína en algunos casos supera el 55 % más según la marca, desde La Vanguardia explican que «la cantidad medida según la marca oscila entre los 144 y los 224 miligramos por una taza estándar, preparada con 8 gramos de café (una cucharada sopera), pero la mayoría contiene entre 176 y 184 miligramos».
La variedad de café empleada, el grado de molienda y el grado de tostado son factores que influyen en la cantidad de cafeína. Cuanto más fino sea el grano más cafeína contiene y cuanto más ligero sea este y por tanto de color más claro, más cafeína. Los extremos se encuentran en las marcas analizadas en el café Fortaleza natural: 144 mg de cafeína/taza, y en el Oquendo natural: 224 mg/taza.