Ana Mena, antes de ser la gran artista que ha conseguido ser a día de hoy, ha demostrado que nadie le ha dado nada y que todo este largo recorrido lo ha construido a base de esfuerzo y trabajo. Pese a conocer su talento innato desde bien pequeña, antes de comenzar sus pinitos, la malagueña también tuvo que enfrentarse a algunos rechazos.
Llegar a ser artista hoy en día puede parecer algo fácil, ya que poseemos más medios que nunca para que la gente que posee algún talento se dé a conocer, pero también es muy complicado porque si cualquiera puede compartir lo que hace en Internet, la competencia es mucho mayor. Pese a que esto suceda hoy, siempre ha habido trabas. Desde los primeros artistas hasta los cantantes más reconocidos del panorama actual.
Este es el ejemplo de Ana Mena, que contaba recientemente en una entrevista cómo se tomó uno de los primero «No» que recibió cuando era pequeña. Para conocer la historia debemos remontarnos a principios de los años 2000 y al famoso programa Veo Veo.
Cuando Ana Mena se dio a conocer
Veo Veo fue uno de los primeros concursos de talentos en España. La creadora fue Teresa Rabal, quien en 1995 fundó los Premios Veo Veo, con el objetivo de fomentar las actividades culturales entre niños y, durante los quince años que duró el programa, se celebraron festivales nacionales, regionales e incluso internacionales en los que podíamos disfrutar del talento de los más pequeños de nuestro país.
De este programa surgieron grandes voces como las de Blas Cantó, India Martínez o Abraham Mateo, además de la de Ana Mena, pero la historia que posee ella con el programa es curiosa, pues cuando se quiso presentar por primera vez, la rechazaron.
Entre risas, Mena comentaba este episodio en su carrera, pues fue un «No» muy anecdótico. Cuando esta gira llegó a la localidad de la malagueña se puso como loca porque quería participar y cuando consiguió convencer a sus padres de poder hacerlo, la pobre Ana se llevó una desilusión.
Cuando se acercó a preguntar si había alguna posibilidad de poder participar en el concurso, un miembro del equipo, que tampoco tenía mucha idea sobre ello, le dijo que el casting ya había pasado, que los participantes ya estaban elegidos hacía tiempo y que sería imposible que Ana participase.
Ante esto, la joven se llevó una mala noticia pero que supo afrontar de la mejor manera: al año siguiente no perdió la oportunidad de presentarse a Veo Veo. Fue en ese mismo momento cuando la trayectoria musical de Ana Mena comenzó a despegar, pues su paso por el programa no pasó nada desapercibido.
