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Lorena García ante el caos en Espejo Público: «No juguemos más»

La presentadora muestra su hartazgo ante las meteduras de pata del equipo de realización

Es verano y en la mayoría de las empresas, los equipos disfrutan de sus vacaciones, siendo sustituidos en su mayoría por becarios o profesionales junior que aún no poseen el músculo necesario para hacer frente a las complicaciones que puedan presentarse en un momento determinado. Pero lo ocurrido el lunes en Espejo Público con la realización colmó la paciencia de su presentadora, Lorena García, que espetó un sonoro «No juguemos más» ante el cúmulo de fallos que se sucedían en el programa.

El equipo de realización del especio matinal de Antena 3 provocó la indignación de Lorena cuando mostró antes de tiempo una imagen que no correspondía con el contenido tratado.

Y no fue un fallo menor, ya que este adelanto originó que se malograra el juego que los colaboradores estaban realizando en el plató al quedar al descubierto la solución.

 

Lorena García se harta de los fallos del equipo de Espejo Público

 

Lo cierto es que no era la primera vez que ocurría… y la paciencia tiene un límite. Por eso, la presentadora mostraba su indignación ante la sucesión de errores en el juego ‘El precio injusto’, un espacio estrenado este verano en el que colaboradores y audiencia deben adivinar cual es el precio de mercado de una casa determinada.

Para ello, se muestran en pantalla varias imágenes del inmueble y se da una detallada descripción de la misma. Y eso era lo que estaba sucediendo en el programa cuando, de repente, se coló la fotografía que no debía y que terminó por desvelar el pastel antes de tiempo.

Y es que un rótulo terminó por mostrar el precio que tenía la vivienda, rompiendo por completo el juego. «¡Pero bueno!», fue la primera reacción de Lorena «¿qué pasa? Se ha visto antes de tiempo… ¿No lo habéis visto? Ains, de verdad. ¿Cuánto calculáis?»

Ya daba igual: la respuesta había salido en pantalla. 6.000.000 millones …. y eso después de una serie de despropósitos en los que las imágenes no aparecían en pantalla, se mostraban con retardo o, como en este caso, antes de tiempo.

La gota que colmó el vaso fue que cuando todos estaban convencidos de que el precio del chalet era ese, otro rótulo mostraba una cantidad diferente: 3 millones de euros.

«Pero, ¿cómo que 3 millones?…. ¿qué me estáis haciendo hoy?….No sé qué está pasando compañeros. Vamos directamente a las fotos es que hemos desvelado el pastel, no juguemos más. A ver Eduardo, por favor, Eduardo, llamando a Tierra…Vamos a verlo directamente. Son 6 millones de euros, es que no tiene ninguna justificación». Y de esta forma, Lorena zanjaba la sección mostrando cierto enojo por lo que había pasado.