Desde que GH VIP dio a conocer la dinámica muchos espectadores lo tuvieron claro: esta iba a desencadenar un sinfín de conflictos y enfrentamientos. Y es que los participantes tienen la posibilidad de obtener ciertos beneficios durante el concurso. Eso sí, por un módico precio que se irá descontando del premio final del ganador.
Esto es lo que ocurría este domingo, cuando se les dio a los nominados la posibilidad de conocer los porcentajes que tenían cada uno de ellos de cara a la expulsión del próximo jueves. Solo uno de ellos podía conocer esta información, si bien para ello tenían que pujar. El que estuviera dispuesto a descontar más cantidad del premio, obtendría el privilegio.
Finalmente fue Álex Caniggia quien, por 200 euros, pudo conocer a quiénes correspondían los porcentajes de las nominaciones. Esto trajo cola, pero no tanto por él sino por Luca Dazi, al que acusaron de haberse ido de la lengua con el resto de los compañeros.
Ocurrió después de que Oriana Marzoli diera en el clavo con la razón por la que el premio final había vuelto a sufrir un descenso. Esto hizo a algunos compañeros, especialmente a Laura Bozzo, señalar a Luca por haberle revelado esta información a su compañera. «No es por nada, pero no es el primer reality que hago. La intuición la tengo«, se defendía Marzoli.
«Todo esto me parece un poco sospechoso. Creo que de alguna manera, yo también tengo un cerebro bastante privilegiado, bastantes años de televisión. Yo la quiero mucho a Oriana, pero estoy segura que Luca, que es mini Oriana, se lo dijo. Es mi opinión. No es contra ti«, decía la peruana, señalando directamente al exconcursante de MasterChef.
«Te voy a decir una cosa, Ion. Yo no juro jamás en vano. Esto es una cuestión que me ha salido del cerebro a mí de intuición. Lógica después de tantos años de tele«, se defendía Oriana, sacando la cara por su compañero. Pero Laura Bozzo no cesaba en su empeño: «Él cuando llegó hizo el comentario de que se había gastado los doscientos«.
El brote de Laura Bozzo contra Luca
La cosa no quedó ahí. Tras despedir Ion Aramendi la emisión, la bronca continuó en la casa de Guadalix. «Algunos aquí se han vuelto insoportables, creo que deberían de pasar por el colegio antes de venir acá«, espetaba Bozzo, muy molesta, que volvía a repetir que Luca era un «mini Oriana» y que desde que regresó a la casa «se volvió insufrible«.
Evitando entrar al trapo, Luca se levantó y se fue del salón, actitud que encendió aún más a Laura Bozzo. «Carajo, ¡ven acá!«, expresaba esta mientras arrojaba un cojín sobre la mesa, tirando un vaso que había sobre ella. «No, es que ya esto me llegó. Viene este huevón acá, ¿qué se cree?«, maldecía esta.
