La noticia sobre la nueva maternidad de Ana Obregón nos ha sobrecogido a todos. Pese a que nadie esperaba que volviese a convertirtse en madre a sus 68 años, parece ser que la actriz lo tenía decidido desde hace bastante tiempo.
Según la revista ¡Hola! Ana Obregón ha dado la bienvenida a su segunda hija a través de un proceso de gestación subrogada. Un proceso que ha getionado en la más absoluta discrección y del que solo eran conocedores algunos de los miembros de su círculo más íntimo. Sin embargo, mirando ahora todo con perspectiva se ha observado que la actriz había dejado algunas píldoras en la esfera pública que alertaban de lo que iba a suceder.
Cabe recordar que Ana Obregón lideró las Campanadas de Fin de Año en La 1 de TVE, una noche en la que narró un discurso que habló mucho de amor y de la posible nueva etapa que iba a empezar: «Deseo que 2023 sea la pandemia del amor», un comentario que hizo sabiendo que este nuevo año le iba a brindar la mejor de las noticias. Es cierto que estas palabras también hicieron referencia a las enfermedades y otros conflictos sociales, pero seguramente en su voz interior resonase la noticia de su futura hija.
Uno de los hechos que ahora cobra sentido en toda esta historia son las palabras que ha pronunciado en algunas de sus apariciones públicas, en las que actualmente muchas se están mirando con lupa. Bien es cierto que durante todo este tiempo, Ana Obregón siempre que ha tenido ocasión ha reclamado más financiación para la lucha contra el cáncer, enfermedad que se llevó a su hijo Aless Lequio. Sin embargo, en algunas declaraciones a otros medios, como por ejemplo a la revista ¡Hola! ha reconocido no estar bien pero estar segura de «salir» adelante. También ha hablado que ha encontrado «ayudando a los demás» un refugio que le permite sentirse bien y reducir el dolor. Aunque probablemente el que más haya llamado la atención es el de felicitar a todas las madres en su día más especial y recalcando que ha podido cumplir uno de sus mayores sueños en la vida: «ser madre». Estas palabras que podrían pasar desapercibidas, realmente ahora cobran un sentido porque detrás de todo ello podría estar ya subayeciendo el nacimiento de su pequeña.
Las redes sociales, uno de sus principales refugios para expresar el amor y la tristeza que siente tras las pérdidsa de su hijo y sus padres, han sido también un escenario más en el que encontrar pistas que podrían confirmar su sefunda maternidad. . «Los cuentos tienen siempre finales felices«, recordando a su padre e hijo. Aunque también aseguraba que «mirar al cielo el daba fuerzas para seguir adelante», ya que es ahí cuando «brilla un poco el sol».
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