Kiko Rivera toma la decisión definitiva para separarse de su madre

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Últimamente el clan Pantoja está más movidito que nunca. Tras la boda de Isa Pi, las cuerdas en la familia están más que tensas y, aunque Kiko Rivera ha preferido mantenerse al margen, su ausencia durante el enlace ha sido más que sonada.

El Dj, sin embargo, sigue cosechando éxito con su último tema, El Mambo y, aunque ha preferido hacer oídos sordos de cara a los medios de comunicación sobre las últimas polémicas de su hermana, sus movimientos por detrás no han sido en vano.

Las buenas noticias de Kiko Rivera, eclipsadas

Lo mires por donde lo mires, el hijo de Isabel Pantoja está viviendo uno de los mejores momentos de su vida. En lo personal, la vida le sonríe junto a Irene Rosales. En el terreno profesional, no puede pedir más, y es que parece que ha resurgido para traernos un temazo. Sin embargo, si nos vamos a lo familiar… la cosa no están tan bien.

Las idas y venidas con su madre siempre han estado al pie del cañón. Cuando la relación entre ambos parece que mejora, otra lo empeora. Pero ahora parece que Kiko Rivera habría tomado la decisión de poner el punto y final a la relación madre e hijo. Nada mejor para ello que desvincularse de la herencia de la tonadillera, según ha informado Marisa Martín Blázquez.

 

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«Hasta donde sé, la información que manejo, Kiko está encargándose para saber cómo poder renunciar a la herencia. No querría ni la legitima para él. Ni que sus hijos hereden la deudas de la abuela», explicaba la colaboradora en la TardeAR.

«La historia es complicada porque tendrían que hacer una gestión delante del notario una vez Isabel falte, y Dios no lo quiera, para renunciar él y sus hijos. Es decir, los hijos de Kiko, en ese momento, tendrían que tener una serie de testigos para confirmar que, efectivamente, no quieren aceptar la herencia», manifestaba.

Isabel Pantoja, entre las cuerdas

La decisión de Kiko Rivera de desvincularse de cualquier lazo que le una a su madre, más que la sangre que es algo de lo que no puede huir, vendría tras las últimas informaciones con Hacienda.

La situación económica de la tonadillera cada vez es más difícil y, aunque esto no es algo nuevo, parece que no consigue despegarse de sus deudas: «En la tercera planta del edificio de Hacienda, cuando se entera de lo que debe, se desmaya«, aseguraba Carmen Borrego hace unos días.