Soldar una independencia desde el primer momento y a la vez construir unos objetivos juntos puede considerarse uno de los cimientos para alcanzar un vínculo de manera sana. Las relaciones de pareja son dinámicas y cambian con el paso del tiempo. Esto se debe a la rutina, algunos problemas u otros factores externos que hace que se vayan atravesando diferentes etapas.
Aunque alguna de estas fases puedan hacerte pensar que ya no hay amor o te haga sentir triste y en tensión, es importante que sepas que cualquier fase en la que esté tu relación tiene solución.
Sabías que…
Las relaciones de pareja deben tener tres apoyos fundamentales: la confianza, el respeto y el compartir. La confianza es esencial, el respeto implica valorar los sentimientos y opiniones y compartir ayuda a crear un proyecto común (amigos, actividades e intereses)
La psicóloga Lidia Alvarado propone una serie de preguntas de SÍ o NO como respuesta para saber si tu relación tiene futuro. Debes marcar la respuesta que describa mejor la dinámica que exista en tu día a día con tu pareja.
1. Cuando hay un conflicto en la relación, ¿sabéis gestionarlo de una manera cordial?
A. Sí, lo hablamos de manera tranquila para llegar a una solución que sea buena para ambos.
B. No, nos cuesta mucho llegar a un acuerdo e incluso en ocasiones el desencuentro termina en una discusión acalorada con insultos o faltas de respeto.
2. ¿En tu relación de pareja mantenéis el juego, la pasión y las relaciones íntimas?
A. Sí, mantener viva la pasión es fundamental en nuestra relación. Tenemos relaciones íntimas de manera habitual o buscamos de forma activa maneras para que la chispa y el juego estén presentes.
B. No, el juego pasional y la frecuencia de nuestras relaciones íntimas es cada vez menor; o cuando las tenemos es más por rutina u obligación que por ganas reales.
3. En vuestro tiempo libre, ¿es importante pasar tiempo juntos?
A. Sí, le damos prioridad a hacer planes en pareja porque disfrutamos mucho del tiempo que compartimos juntos.
B. No, buscamos la forma de hacer planes con otras personas porque nos parecen más divertidos.
4. ¿Tienes buena comunicación con tu pareja?
B. No, hablamos poco y nuestras conversaciones suelen ser en torno a temas superficiales; a veces no sabemos de qué hablar.
5. ¿Tenéis el mismo proyecto de vida? ¿Deseáis el mismo estilo de vida?
A. Sí, tenemos el mismo proyecto de vida, tenemos los mismos intereses y objetivos similares.
B. No. Hay algunas diferencias respecto al estilo de vida que queremos seguir y a nuestros intereses en un futuro.
6. ¿Tus valores y los de tu pareja coinciden?
A. Sí, tenemos los mismos valores o muy parecidos en cuanto a los temas importantes de la vida: religión, política, relaciones, estilo de vida, familia…
B. No, nuestros valores son diferentes o incluso opuestos. Pensamos de manera diferente la mayoría de las veces.
7. ¿En vuestra relación le dais importancia a cuidar el espacio personal de cada uno y tenéis vida propia más allá de la pareja?
A. Sí, nos encanta pasar tiempo juntos, pero también nos gusta respetar nuestro espacio personal y tener vida social a parte de la pareja.
B. No, nuestra vida a parte de la pareja es muy reducida. Solemos hacerlo todo juntos y raramente hacemos algo sin que el otro esté.
8. ¿Sientes que tu pareja te ayuda a crecer como persona y saca lo mejor de ti?
A. Sí, mi pareja es un apoyo muy importante en mi vida. Me ayuda y apoya en mis decisiones más importantes.
B. No, en ocasiones me siento poco apoyada en temas importantes para mí y frena mi crecimiento y desarrollo personal.
Si has obtenido ocho respuestas de A, es que tu relación está construida sobre una base sólida y tiene todo lo necesario para que compartáis un futuro juntos. La experta Alvarado aconseja que «lo importante es seguir trabajando en la relación para no perder todos los hábitos positivos que ya existen y que la relación sea cada vez más fuerte».
Si tus respuestas de A están entre seis y ocho, La psicóloga apunta que «Hay muchos ingredientes y hábitos saludables en tu relación pero aún debes seguir trabajando en aquello que os diferencia con el objetivo de que no sea un obstáculo que os impida tener un futuro en común».
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