El verano en España no solo trae consigo altas temperaturas y playas soleadas, sino también una amplia variedad de tradicionales fiestas de pueblos. Desde encantadores eventos llenos de color o comida y bebida, hasta emocionantes competiciones o celebraciones culturales muy variopintas.
Nuestras fiestas atraen a visitantes de todas partes, tanto de otras provincias o comunidades, hasta incluso gente de otros países. Todos ellos con ganas de juntarse con otras personas, conocer culturas, tradiciones, gastronomía… y sumergirse en la autenticidad y las historias que cada una de estas festividades esconden tras ellas.
Las fiestas de pueblo que no te puedes perder este verano
La Tomatina de Buñol (València)
La Tomatina es una batalla épica de tomates que no te puedes perder. En este pueblo, una vez al año, las calles se llenan de toneladas de tomates maduros y jugosos. La gente se reúne con ansias y armada con su ropa vieja viejas y gafas de buceo para lanzarse tomates unos a otros sin parar. Es una guerra pacífica llena de diversión y risas donde no hay enemigos, solo amigos en medio de una lluvia de salsa de tomate. Es una tradición que ha sobrevivido durante décadas y que demuestra que, a veces, es mejor lanzar tomates y soltar risas que preocuparse por mancharse.
La Tomatina de Buñol | Getty
Hogueras y barracas de Sant Vicent del Raspeig (Alicante)
Las Hogueras son pura fiesta y llamas en el aire. Imagina un lugar donde enormes construcciones de madera y cartón se alzan orgullosas en cada esquina de la ciudad, listas para ser devoradas por el fuego en una noche mágica. Pero no te preocupes, no se trata de un incendio descontrolado, ¡es una celebración llena de color, arte, tradición y música! La emoción va creciendo a medida que pasan los días, por ello los paisanos se juntan cada día en sus racós y barracas para celebrar estas fiestas. Cuando llega la última noche y las llamas cubren los monumentos, la gente se congrega alrededor de estos y los bomberos, mientras controlan el fuego, disparan agua a todo el mundo. Es una ocasión para liberar la energía acumulada y quemar todo lo malo del pasado mientras nos dejamos llevar por el espíritu festivo.
La batalla del vino de Haro (La Rioja)
Aquí, las calles se convierten en un campo de batalla lleno de botellas de vino. La gente se reúne armada con sus cubos, pistolas de agua y, por supuesto, litros y litros de vino para lanzarse unos a otros sin parar. Es una batalla única donde el objetivo es salpicar a tus amigos y otros desconocidos y dejar tu marca en sus ropas. Además, después de la batalla, todos se reúnen para disfrutar de una buena copa y celebrar la amistad. Así que, por mucho que sea una batalla, al final todo queda en un empate que se celebra.
Batalla del Vino de Haro | Getty
Romeria Vikinga de Catoira (Pontevedra)
Esta romería te hará sentir como si viajaras en el tiempo. Durante esta celebración épica, todos se disfrazan con trajes vikingos y recrean la llegada de los invasores nórdicos a la costa gallega. ¡Es como un capítulo de Juego de Tronos en vivo! Los vikingos desembarcan en sus barcos de guerra, mientras la multitud anima y se prepara para un festín digno de un guerrero. Hay música, bailes tradicionales y, por supuesto, comida y bebida típicas para disfrutar. Además, la lucha por el control del castillo de Catoira es un espectáculo emocionante que te mantendrá sin aliento.
Romería vikinga de Catoira | Getty
Nochevieja en agosto de Bérchules (Granada)
En esta localidad como si el tiempo se volviera loco y decidiéramos celebrar el Año Nuevo dos veces al año. Aquí, en pleno verano, la gente se viste elegante y se prepara para despedir el año, ¡pero sin esperar a diciembre! Es como una fiesta temática de viaje en el tiempo, donde las campanadas suenan a medianoche, los fuegos artificiales iluminan el cielo estrellado y las uvas se comen con alegría y entusiasmo… Vamos, igual que la Nochevieja tradicional, pero con algo más de calor.
Semana renacentista en Medina del Campo (Valladolid)
Si quieres encontrarte con caballeros, reinas y damas elegantes por todas partes, este es tu lugar. Durante la Semana Santa, las calles se transforman en un escenario renacentista lleno de música, bailes y procesiones. En lugar de los tradicionales nazarenos, verás a elegantes cortesanos vestidos con atuendos históricos, desfilando con orgullo y solemnidad. Los tambores retumban, las trompetas suenan y los habitantes se convierten en personajes de un cuento de hadas medieval. Además, durante esta semana, los mercados renacentistas cobran vida, ofreciendo delicias culinarias y artesanías típicas de la época.
