Ella recuerda que miraba todo tipo de revistas, desde Harley Davidson hasta revistas sobre adoptar mascotas, pero no las de moda. «Cuando fui a hacer mi primer casting, me tocó comprar un vestido porque ni siquiera tenía uno», recordó.
Después de años de esfuerzo y perseverancia, Esther finalmente llegó a Nueva York, donde su carrera despegó. Sin embargo, no fue un camino fácil. Se enfrentó a la dura competencia de otros modelos y a largas jornadas de casting. Pero Esther tenía algo que la destacaba: experiencia y determinación. A pesar de los obstáculos y desafíos, Esther Cañadas logró hacer historia en el mundo de la moda y demostrar que el esfuerzo y la perseverancia pueden llevar a cumplir los sueños más inesperados. Su viaje desde querer ser detective privado hasta convertirse en una supermodelo es un ejemplo inspirador de cómo la vida puede tomar caminos sorprendentes y emocionantes.
Hablando sobre sus amigos en la industria de la moda, Esther ha destacado que a lo largo de los años ha mantenido amistades cercanas tanto con personas que ha conocido recientemente como con aquellas que conoce desde hace mucho tiempo. Las redes sociales han ayudado a mantener el contacto con amigos de todo el mundo, incluso cuando la distancia física parece insuperable.
La charla se vuelve más intensa cuando Esther compartió su batalla contra una enfermedad crónica y debilitante que la afectó durante seis años. Aunque experimentó momentos de desesperación, nunca se rindió y buscó diversas formas de tratamiento y curación. Actualmente, se siente agradecida por estar viva y se preocupa profundamente por las personas que aún luchan contra enfermedades similares. Su mensaje de esperanza es que no importa cuán difícil sea la situación, nunca te rindas.
La entrevista también se centró en el amor de Esther por su hija, a quien considera su mayor regalo. Ser madre soltera no ha sido fácil, pero Esther valora cada momento que pasa con su hija y se siente agradecida por la oportunidad de criarla.
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