Por lo visto enamorarse de un catalán fue para Shakira algo mágico, ya que suponía para ella adentrarse en sus raíces, pues el bisabuelo de Nidia Ripoll, su madre, era de Cataluña, un lugar que en su día este dejó para ir a Colombia. Aunque hace muchos años de aquello para la colombiana las raíces son muy importantes y por eso enamorarse de Piqué para ella fue casi una señal.
Incluso antes de ser la pareja del futbolista, Shakira visitó la localidad de Ripoll junto a Antonio de la Rúa, su pareja en aquel momento, con quién se alojó en una casa rural, integrándose con la gente del pueblo con la que realizó incluso labores agrícolas como dar de comer a las vacas.
Desde que su relación con Piqué se formalizó, Shakira quiso adaptarse a la familia de este y ser uno más. Para ello, una de las primeras cosas que hizo fue volver a Ripoll y a toda la zona de la que proviene su madre, por donde se la vio paseando junto a Piqué y su familia. Además, intentó buscar de nuevo sus raíces, algo complicado puesto que ya no quedaba nadie de su familia allí.
El esfuerzo de la artista por integrarse y agradar a la familia de su novio tuvieron su efecto y durante un tiempo se llevaron tan bien que la pareja incluso decidió construir junto a su propia casa dos más para sus padres.
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