Han pasado seis meses desde que saltó la noticia de la sonada ruptura entre Elena Tablada y su exmarido Javier Ungría. Pero ha sido ahora cuando la diseñadora de joyas se ha decidido a hablar, por primera vez, de cómo fue su ruptura y de revelar los verdaderos motivos que la llevaron a separarse del padre de una de sus hijas, Camila, de dos años de edad.
La empresaria ha concedido una entrevista exclusiva a la revista ¡Hola! en la que lo ha contado todo sobre el fin de una relación que durado seis años en la que ha habido dos bodas (sí, dos); una ceremonia en Miami (EE.UU.) y en Cuba, ambas en 2018. Pero el pasado mes de agosto, fue la propia Tablada quien comunicó su ruptura a través de las redes sociales.
Pese a ello, la diseñadora mandaba un mensaje de tranquilidad y aseguraba que «estaremos unidos siempre». Sin embargo, todo se complicó (o eso parecía) cuando dos meses después salieron a la luz unas imágenes en la prensa rosa en las que aparecía Javier Ungría besándose con otra mujer.
Elena Tablada: «Las excusas fueron tan crueles…»
«Ha sido un proceso muy duro y sigue siéndolo. Perdí mi ideal, mi estabilidad económica, mi imagen de mí misma, mis ganas, mi luz… Pero en esa oscuridad aprendí la importancia de poner límites y de dosificar lo que entrego», explica Tablada a la revista española.
«Ahora mismo estoy en ese proceso de quererme, de cuidarme, de valorarme», reflexionaba la empresaria. Además, ha asegurado que a raíz de este punto de inflexión se centrará de lleno en sus dos hijas: Ella, de 12 años —fruto de su relación con David Bisbal— y Camila, de dos años —fruto de su relación con Ungría—. Y aunque ha admitido que ha llorado lo que no está escrito tras su última separación, también ha confesado que ha sido un proceso «enriquecedor».
En cuanto a los motivos de su última separación, Tablada ha explicado que su matrimonio, concretamente el amos que ambos sentían el uno por el otro, «no era lo suficientemente fuerte» como para continuar juntos, por lo que ambos decidieron emprender caminos separados.
«Habría sido todo más fácil y sano si hubiera habido terceras personas. Las excusas fueron tan crueles que, como madre, solo me nació dejarlo ir y alejarme lo máximo posible», ha concluido Elena Tablada.
Por el momento, se desconocen el punto en el que estará a partir de ahora su ya exmarido, más allá de ser el padre de una de sus pequeñas, pero lo que sí sabemos es que la madrileña no tiene apenas fotos junto a Javier Ungría en su cuenta de Instagram. ¿Es su forma de dar carpetazo y emprender su etapa de ‘borrón y cuenta nueva’?
Hace tan solo unas semanas, la empresaria subió una foto junto a su familia con un mensaje un tanto sugerente que deja lugar a las dudas: «Ellos, los que demuestran y en lugar de prometer… y la locura (Tablada) todo lo cura!».
