El incremento de la cesta de la compra y los carburantes a causa de la inflación ha hecho que esta cuesta de enero sea aún más atípica. Y pese a que el frío parece que nos ha dado una tregua, todavía queda mucho para que demos la bienvenida a la tan ansiada primavera. Hasta el momento toca seguir buscando trucos para ahorrar en la calefacción.
Teniendo en cuenta que todos los hogares han puesto en marcha medidas para pagar menos desde que los termómetros comenzaron a descender sin descanso el pasado mes de noviembre, ahora hemos rescatado un truco que podría ayudarte a mantener el calor en tu hogar y, en consonancia, a pagar unos eurillos menos a final de mes.
El programa Ya es mediodía ha desvelado esta misma mañana del 26 de enero un infalible truco con papel de aluminio que podría ayudarte a mantener la temperatura de tu hogar. ¿Cómo ponerlo en práctica?
Necesitarás colocar un poco de papel de aluminio entre la parte trasera del radiador y la pared y cubrirlo todo para que así se mantenga el aire caliente. De esta manera, el aluminio actúa de aislante ya que concentra mejor el calor y hace que este se mantenga en el ambiente creando una sensación más cálida en el hogar, similar a la de si hubieses subido los grados de la casa.
Según han detallado en el programa de Telecinco este método es muy útil, sobre todo, si la casa no está muy bien aislada o si las paredes son muy finas. Algo que te ayudará a no poner la calefacción más tiempo y, por ende, a ahorrar a final de mes.
Consejos para ahorrar en la calefacción
Un experto en energía Javier Dasí ha intervenido en este espacio de Telecinco para aclarar que este truco del papel de aluminio sería más efectivo si dejamos un espacio entre el radiador y el papel aluminio, ya que así el aire caliente no se perdería por la pared y se concentraría más en la habitación.
Loading ...
El especialista también recuerda que si lo que queremos es pagar menos en la factura de la luz y que nuestra casa está templada lo indispensable será poner en práctica los siguientes hábitos:
Cerrar las puertas de aquellas zonas de la casa que no se vayan a utilizar.
Mantener un correcto aislamiento de la casa.
Utilizar tantas prendas como se pueda.
Poner la calefacción a una temperatura que oscile los 17 y los 21º C.