Un gesto que no hubiera resultado llamativo si antes no se hubiera producido la escena que la familia real protagonizaba antes del posado frente a los medios.
La Princesa Leonor aparecía cogida del brazo de su abuela y cuando se disponían a colocarse para la foto, la Reina Letizia agarró el brazo de su hija para apartarla de su abuela e indicarla dónde debía ponerse para la instantánea. Un gesto que recuerda inevitablemente al que tuvo Letizia con la reina emérita en la catedral de Palma, cuando se interpuso entre su suegra y sus hijas para que no se hicieran una foto que, supuestamente, la emérita quería para su álbum personal.
La Reina Sofía, visiblemente molesta por la situación y las formas, se dirigió al extremo donde su nuera le indicó que debía permanecer.
En la foto previa aparecieron acompañando a la infanta Sofía en un día tan importante sus padres, su hermana Leonor, su abuela Sofía y sus abuelos maternos, Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz.
Estos últimos acudieron con sus respectivas parejas que, sin embargo, no posaron en la foto oficial.
La infanta Sofía se confirmaba, al igual que lo hizo su hermana, en la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora, en Aravaca, junto a sus compañeros de 4º de la ESO del colegio Santa María de los Rosales. Leonor, que ya ha vuelto a España tras su intenso periplo por Gales, ha ejercido de madrina de Confirmación de su hermana.
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