Hasta ahora, los autónomos eran libres de escoger qué base de cotización querían, independientemente de lo que ganaran, por eso la mayoría se decantaba por escoger la mínima. Ahora el panorama va a cambiar en este sentido, ya que a partir del año que viene, «los trabajadores deben cotizar por sus ingresos netos y no según el tipo de cotización que ellos elijan», explican desde lainformacion.com.
El cambio se hará de manera paulatina con un sistema de hasta quince tramos de cotización según los ingresos de cada uno hasta que en 2025 se implante el sistema definitivo.
Con la llegada de este cambio, la Seguridad Social ha dado vía libre a este colectivo de trabajadores para que ajusten su cotización a uno de estos quince tramos según sean sus ingresos netos. Según explican desde el mismo medio, «la mayoría no ha hecho el cambio, una parte por desconocimiento y otra por seguir manteniendo una cuota más baja y tener así más capital de forma temporal».
Tan sólo 400.000 autónomos han ajustado su base de cotización según su previsión de ingresos, frente a los casi tres millones que mantienen la anterior a 2023. Aunque todavía hay plazo para ajustar la cuota de autónomo para este año, hasta el 31 de octubre concretamente.
Con el nuevo sistema los autónomos podrán cambiar su base de cotización cada dos meses, «con seis ventanas para ajustarla así a sus ingresos netos», explican. Y añaden que «la ventana de octubre es la última para hacerlo y se aplicaría durante los dos últimos meses del ejercicio».
El cambio se puede hacer a través de Importpass, el nuevo espacio de la Seguridad Social diseñado para realizar trámites desde cualquier dispositivo de forma sencilla y personalizada. En este caso debes hacerlo desde el apartado, «Modificación de datos de trabajo autónomo»
Por otra parte, aquellos autónomos que deseen mantener su cuota actual, tendrán que regularizarla en 2024 si o si. Es decir, tendrán que ingresar las cantidades que deban por la diferencia entre la base por la que han cotizado y por la que deberían haberlo hecho según sus rendimientos. La Seguridad Social comunicará el resultado de la regularización a través de sus sistema de notificaciones telemática.
Por eso la Tesorería General de Seguridad Social (TGSS) cruzará datos con la Agencia Tributaria para poder determinar el rendimiento neto del autónomo. Para ello usarán «el dato de los rendimientos anuales del autónomo que conseguirán de forma automatizada una vez termine la campaña de la renta. Es decir, que se basarán en las cifras de IRPF para hacer el cálculo», tal y como explican desde la Revista de la Seguridad Social.
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